Sofía Gómez Uribe, nuevo récord mundial en inmersión de apnea
Mientras Sofía aguanta la respiración bajo el agua, irónicamente le da a los Colombianos un respiro, porque sin duda será un triunfo acumulado más para el país en una prueba deportiva llamada apnea. La pereirana logró un nuevo récrod mundial para Colombia.
Actualización (julio 7)
A tan solo 2 días de que la pererirana Sofía Gómez Uribe batiera el récord mundial de apnea, la deportista colombiana rompió su propio récord este viernes al sumergirse 84 metros en la categoría CWT con Bialetas.
Actualización (julio 5)
La pereirana logró este miércoles 5 de julio un nuevo record mundial en aguas de República Dominicana al sumergirse 83 metros en el mar con la única ayuda de sus aletas de buceo. Sofía es la mejor del mundo en inmersión de apnea con bialetas. ¡Felicitaciones! Invitados a recordar nuestra entrevista con la deportista colombiana.
Sofía Gómez Uribe tiene 24 años de edad, nació en Pereira pero hace más de cinco años vive en Medellín. Es ingeniera civil, le gusta la hamburguesa y el sushi, tuvo un gato al que llamó “rata”, tiene más de 41 mil seguidores es Instagram, unas fotos que a lejos ustedes o yo, posiblemente podamos hacer, además alcanza los 5 minutos sin respirar.
Cinco minutos, un minuto y 24 segundos más de lo que dura la primera canción que escuchó de su banda favorita en un canal de televisión: Jaded, de Aerosmith... Un plus, estos cinco minutos los aguanta estando debajo del agua.
La apnea, como un deporte en Colombia, no es una disciplina muy conocida, incluso ni Sofía sabía en un inicio en realidad cómo se practicaba este deporte al que llegó casi que por casualidad un día en que su profesor de natación le pidió a ella y los demás nadadores hacer la máxima distancia en piscina. Hoy Sofía cuenta con tres (3) récords panamericanos y uno (1) suramericano, lo que la cataloga como una de las mejores apneístas del continente.
Ese primer día en el que Sofía “practicaba” apnea alcanzó los 100 metros de distancia en compañía de sus bi-aletas, y desde ese momento hasta hoy, ha casi que duplicado su primera vez: 195 metros, casi cuatro piscinas olímpicas de un sólo respiro. Igualmente el primer día que hizo una inmersión alcanzó 15 metros de profundidad, y hoy su récord son 95 metros.
Sofía tiene una sonrisa que contagia, habla pausado y suena muy paisa, incluso cuando habla en inglés. Cuando desciende, sus pulmones se contraen, su sangre sube al cerebro y su frecuencia cardiaca disminuye, pero ella está tranquila y su mantra al sumergirse es paz, amor, tranquilidad y azul. Fuera del agua nos contó un poco sobre lo que hace...
¿Te imaginaste siendo la mejor de tu país?
Yo nunca pensé que fuera a terminar haciendo apnea. Cuando comencé fue casi que por error y tampoco imaginé que fuera a llegar lejos. Sin embargo cuando empecé me empezó a gustar un montón, y empecé a ser buena, a hacer buenas distancias y después profundidad, y ahí sí me imaginé y dije ‘quiero ser la mejor’. Yo me siento muy orgullosa de competir por Colombia… siempre es bonito tener presente que es un triunfo para todo el mundo así suene muy cliché, pero yo creo que el deporte trae mucha alegría a la gente y es una manera de quitarse todas esas cosas malas que pasan en el país y eso me hace feliz. Para mí es darle un respirito a la personas con mis triunfos y las cosas buenas que me pasan.
¿Qué reto tienes para este 2017?
La primera cosa que vamos a hacer es este intento de récord mundial, el de peso constante con bi-aletas que lo vamos a hacer entre junio y julio. Yo creo que esa es la meta más grande que tengo este año. Luego, la otra competencia a la que voy a ir es en agosto al campeonato mundial en Honduras y para mí es muy importante, yo quiero ir y tener un podio en cualquiera de las tres (3) disciplinas, y la última competencia será en Dominica, la Blue Element, que es una competencia que organizamos mi novio (Jonathan Sunnex, apneísta de Nueva Zelenda) y yo. Las competencias están muy cercas una de otra entonces en este momento estoy preparándome físicamente, estoy haciendo el entrenamiento base para poder estar lista para estas competencias.
¿Cómo es un día de entrenamiento de Sofía Gómez?
Yo entreno todos los días, sólo tengo uno o dos días de descanso a la semana. Y todos los días voy al gimnasio, y también trato de nadar todos los días, aunque si a las seis (6) de la mañana está lloviendo, pierdo ese día en piscina porque yo me voy en bicicleta y estoy como a media hora. Entonces siempre hago gimnasio para estar fuerte - dice sonriendo -, obviamente, y entreno apnea en piscina, entonces hago puros ejercicios sin respirar para poder estar preparada para la profundidad y monto bici todos los días, y los fines de semana procuro hacer una vuelta larga en bici, que pueden ser unos 100 kilómetros en cada salida.
¿Qué te pasa por la cabeza cuando estás a tantos metros bajo el agua?
Yo normalmente trato de dejar la mente en blanco porque uno entre más piense, pues más oxígeno gasta, entonces trato como de pensar muy poco, o pensar en algo que me haga feliz, algo que no me haga pensar que estoy a 90 metros de profundidad.
¿Sientes miedo antes de entrar al agua?
Nervios sí, pero miedo no. Yo creo que si me daría miedo no practicaría este deporte porque imagináte uno por allá abajo bien profundo con miedo… se muere por ahí –dice entre risas -
¿Te gusta escuchar música previa a sumergirte?
Yo no sé mucho de géneros musicales pero me gustan cosas muy diferentes, por ejemplo a veces escucho a Carlos Vives minutos antes de hacer una inmersión porque me transmite como energía, positivismo, por ejemplo la Tierra del Olvido me gusta mucho, y esas cosas como Clásicos de la Provincia (1993). También escucho mucho a Calvin Harris y la música así.
¿Tienes una banda que te desvele?
Mi banda preferida de todos los tiempos es Aerosmith. Amo a Steven Taylor con loca pasión y desesperación -vuelve a sonreír- . Yo antes cuando estaba chiquita escuchaba pop, era con Britney Spears de arriba pa’ abajo, y un día viendo Mtv vi un video de Aerosmith, que era Jaded, del disco Just Push Play (2001) y amé esa canción. Compré ese CD, y desde ahí mi gusto por Aerosmith ha crecido.
Fui al primer concierto que dieron aquí en Colombia en 2010 y el año pasado volví al concierto y casi me muero de la emoción y después de ese concierto como que volví a escucharlos más y ‘oh, my god, los amoooo’ -culmina Sofía con una carcajada-.