Los puntos clave del debate feminista al que solo fue Petro
Pasaron unas dos horas antes de que comenzara el espacio de discusión en las instalaciones de la ECCI en el centro de Bogotá. Dos horas en las que también por Facebook, las diferentes cuentas que transmitieron el espacio en vivo, retuvieron a su audiencia, advirtiendo el retraso: ya se sabía que Hernández había cancelado su participación, pero no se contaba con el retraso de Petro.
Sin embargo, el espacio que duró aproximadamente dos horas, sirvió para que el candidato de izquierda, Gustavo Petro compartiera con un auditorio lleno y casi 20 mil personas conectadas en redes sociales, sus propuestas e ideas sobre temas como la despenalización del aborto, las violencias basadas en género y contra la población LGBTIQ+, el sistema nacional de cuidado, el enfoque diferencial de género en la implementación de los acuerdos de paz, interrogantes sobre migrantes, educación y temas medioambientales.
Moderado por Catalina Ruiz Navarro, directora del medio de comunicación latinoamericano y feminista, Volcánicas, Matilde de los Milagros, cofundadora del mismo y por Juliana Hernández, Directora de Artemisas, una organización no gubernamental que impulsa agendas políticas feministas en el país, este espacio, planeado meses antes de las elecciones del pasado domingo 29 de mayo y orientado a la segunda vuelta, se centró en las ideas de este candidato alrededor de estos temas, que como él mismo dijo, no se tocan generalmente en debates televisivos.
Así, bajo una iniciativa que reunió a más de 30 organizaciones sociales de mujeres, feministas y LGBTIQ+ como la Fundación Artemisas, la Revista Volcánicas, la Red Nacional de Mujeres, la Corporación Caribe Afirmativo, la Corporación Casa de la mujer, la Ruta Pacífica de las Mujeres, SISMA Mujer, entre otras y un proceso de articulación que según dijo una de las moderadoras tomó al menos seis meses de organización, este debate tuvo una metodología sencilla: el candidato contó con dos minutos para responder cada una de las preguntas, un minuto y medio para replicar cualquier duda que quedara suelta y también hubo rondas de preguntas más dinámicas que le dieron un toque divertido y a veces idóneo para votarle una que otra pulla al político.
Antes de dar paso a la discusión y proponiendo una dinámica distinta, en lugar de presentar al candidato, Catalina Ruiz le pidió a él mismo que se describiera e hiciera lo mismo con su contrincante, Rodolfo Hernandez. A lo que este respondió era un luchador, un resistente y calificó a su opositor como un negociante, un hombre que ha usado la política exclusivamente para hacer negocios.
Luego siguieron los temas propuestos: en el primer bloque, de derechos sexuales y reproductivos, Petro afirmó que para los casos de interrupción voluntaria del embarazo y para garantizar la despenalización total del aborto en el país con un límite de 24 semanas, su gobierno mantendrá disponible una red pública hospitalaria y ojalá atendida en su mayoría por mujeres. También dijo que habrá un decreto para que la ley privada lo haga.
Así mismo, reflexionó sobre la pregunta de cómo despenalizar socialmente el aborto: “el sistema educativo, los canales públicos, la publicidad de contratación del Estado en los medios de comunicación masivos deben ser una pedagogía que enseñe a la sociedad que cuando una mujer toma esa decisión libre, no es criminal”.
De la misma manera, para darle frente a las violencias basadas en género, el candidato dijo que es clave redactar nuevamente el Código Penal que según sus palabras ha sido redactado en su mayoría por hombres que desconocen las realidades de las mujeres. Para él, una perspectiva centrada en la niñez, las mujeres y en general, las poblaciones más vulnerables, debe volverse prioritaria a la hora de redactar este documento.
Luego, hubo espacio para las risas en un fragmento denominado “¿Quién es más probable que...?” en el que Petro debía señalar si él o Hernández era más probable que participaran o ejecutaran distintas situaciones o acciones políticas planteadas.
La primera pregunta fue “¿Quién es más probable que se emborrache y haga un show en público?”, a lo que este respondió señalándose a sí mismo, que él, provocando en el público aplausos y risas. También, dijo que sería más probable que durante las protestas Hernandez utilizara tanquetas contra la población civil y que este mismo golpearía a alguien de su equipo. Sobre sí mismo, el candidato de izquierda respondió que sería más probable apostarle a un gobierno paritario, obtener más apoyo de jóvenes y mujeres en las urnas y que la tasa de maternidad forzada se redujera con sus propuestas.
Luego, bajo la moderación de Juliana Hernández de Artemisas, el candidato habló de la implementación de la sentencia Sergio Urrego para evitar desenlaces fatales como el suicidio refiriéndose a su experiencia en la alcaldía de Bogotá. “En los colegios se impartían cursos y clases para evitar el bullying contra personas LGBT. Cuando se llega a la edad de descubrir identidad sexual, si esto no ocurre, se puede llegar a los suicidios”, afirmó, agregando, también que es clave llevar estas reflexiones de no discriminación a las familias, primer escenario de discriminación y a los colegios, segundo escenario donde generalmente esto ocurre.
Al hablar de la economía del cuidado, la moderadora mencionó que el trabajo no remunerado de cuidado, es decir las tareas domésticas que no obtienen pago, representan un 20% del PIB de acuerdo al DANE, por lo que es urgente hablar de un sistema nacional de cuidado. El candidato del Pacto Histórico dijo que Bogotá nuevamente le había enseñado muchas cosas y una de esas es que a ciertos grupos poblacionales, como los “viejos y viejas”, no se les puede exigir trabajo. Ellos, dijo, necesitan del Estado y de la sociedad. Según él, lo primero que este sistema debe garantizar es que no haya desnutrición ni hambre, además, dijo que el trabajo del cuidador o la cuidadora debe ser reconocido o si no, estos pueden entrar en círculos de pobreza. Su propuesta en ese sentido es que el tiempo de trabajo de cuidado no remunerado sea computable para una pensión.
Luego, frente a una duda que había sobre una entrevista que este dio en su alcaldía, dijo que los feminismos son “como una vanguardia que va un poquito más adelante de la sociedad”, agregando también que bajo su perspectiva, “no pueden ir tan adelante que la sociedad ya no los mire, sino que tienen ir un poquito más adelante de la sociedad para ir arrastrándola”.
En el bloque siguiente el candidato habló sobre los acuerdos de paz, diciendo que lo más importante es recuperar la palabra desde su gobierno, la credibilidad, ya que bajo su perspectiva, el incumplimiento por parte del gobierno también es una forma de violencia. Dijo que la idea es retomar los diálogos con el ELN de forma breve y hacer que los puntos de los acuerdos se cumplan y se vuelvan prioridad, esto teniendo en cuenta la perspectiva de género que ya existe. Y antes de un emotivo aplauso dijo: “no puede haber perdón si no hay reparación integral de las víctimas en Colombia”.
Por su lado, en cuanto a las y los migrantes venezolanos, el político citó al Papa Francisco, diciendo que para él bajo la migración o el éxodo ocurren las nuevas formas de esclavitud sexual y laboral y explicó que lo que hizo Duque al dar un estatuto de refugiado fue importante para no expulsar a los migrantes del país, pero mencionó que el error acá fue no otorgarles derechos. Por esto, dijo, que su propuesta es que estos estatutos cuenten también con derechos como los que tienen los colombianos, así como también dijo, la idea es reconstruir una relación diplomática con el vecino país.
La siguiente dinámica que propusieron las organizadoras fue que el candidato describiera su plan de gobierno sin utilizar la palabra “cambio”. A lo que este respondió: “justicia social, democracia, economía productiva no extractivista, transición a energías limpias, lucha por la igualdad, disminución de pobreza, erradicación del hambre. Derrocar el régimen de la corrupción”, seguido de una ovación importante del público.
Luego, Matilde de los Milagros citó a Indepaz, diciendo que en el país 787 líderes y lideresas que ejercen un activismo en pro de la naturaleza han sido asesinados, por lo que la pregunta acá fue cómo garantizar que ejercer dichos roles no suponga una sentencia de muerte.
A esto Petro respondió: “Aprobaremos el acuerdo de escazú, aunque lamentablemente eso acá no garantiza que dejen de matar”. Y explicó que los conflictos alrededor del agua, la selva amazónica y la del Chocó cada vez producen más tensiones, sobre todo porque existe actualmente un modelo económico extractivista y basado en la cocaína, por eso, cambiar las coordenadas de la economía colombiana, priorizando una economía que cuide la vida, podría ser, según él, una solución para reducir estos asesinatos a a cero.
En este punto del espacio, la moderadora reinvidicó la labor de su fórmula vicepresidencial, Francia Márquez, en defensa del medio ambiente, a lo que el público celebró gritando emocionada. Luego, Petro haciendo una claridad que le siguió a la conmoción colectiva y que conmovió más a las y los presentes, dijo que Márquez no solo sería vicepresidente, sino ministra de la igualdad.
El tema que siguió fue el de los mal llamados “falsos positivos”. Mencionando el asesinato extrajudicial a 6.402 civiles entre 2002 y 2008 y recientes investigaciones periodísticas que evidencian los abusos y los asesinatos en contra de civiles, la pregunta fue por sus políticas en contra de este tipo de violencias. A esto el candidato respondió que estos han sido “los crímenes más grandes en América de toda la historia”. Esto, explicó, radica en una idea de política de seguridad basada en el enemigo interno, que como dijo, pudo ser las Farc, la juventud hace un año o el campesino cultivador de la hoja de coca. Esa política, agregó, llevó a que ocurrieran los mal llamados falsos positivos. Por eso, dijo, en su gobierno se primará una “política de seguridad humana, basada no en la muerte, sino en la vida”. Y buscará abordar el problema del conflicto y del delito con el entendimiento de las causas multidimensionales. Aquí también habló de las políticas carcelarias, diciendo que su plan es que el SENA administre las cárceles del país para convertirlas en centros de educación y también encontrar más adelante distintas oportunidades laborales para exconvictos.
Luego, citando a Afro Colectiva, organización que redactó una pregunta sobre el acceso al ciclo universitario de personas afro y diciendo que tan solo el 3% de estas acceden a educación superior, Matilde de los Milagros le hizo una última pregunta al candidato sobre cómo afrontaría esta realidad. Petro respondió que su gobierno promoverá el sistema de educación superior con las universidades actuales. Dijo que la idea es que este sea gratuito en todo el territorio, ya que la primera barrera educacional es la condición económica. También dijo que las universidades deben contar con un sistema de bienestar estudiantil, para cuando, por ejemplo, un joven llega con hambre y no estudia o una joven es estudiante y a la vez madre cabeza de familia. En ese sentido, por ejemplo, la institución debería contar con un sistema de guardería y esto podrá considerando que debe llegar a todo el país, para anular la discriminación étnica.
De esta forma, el espacio finalizó con un breve análisis de las moderadoras quienes entre otras cosas, concluyeron que el poder de las mujeres para articularse y convocar es enorme.
Juliana Hernández de Artemisas dijo que más de 20 mil personas en redes sociales estuvieron pendientes de cada palabra, lo que demuestra ese poder colectivo y ciudadano que existe. También dijo que a su modo de ver una de las propuestas que más le emociona es la que tiene que ver con el sistema nacional de cuidados y esa promesa de que el tiempo de cuidado no remunerado se traduzca en pensiones. Además mencionó la importancia de contar con garantías de participación política y paridad, en un 50% en todos los espacios. Por su parte, Matilde de los Milagros dijo estar muy emocionada y expresó su alegría de que un espacio así pueda continuar y así mismo garantice el valor democrático de la discusión de las ideas. Para cerrar Catalina Ruiz Navarro dijo emocionada que "esas 25 millones de personas representadas en las urnas podemos poner un presidente solo si seguimos ejerciendo una ciudadanía activa".