[Reseña] ‘Mar de hiladas’ de Babelgam
Placer y satisfacción. Ese par de sentimientos que se juntan cuando, después de mucho tiempo, nos encontramos con una propuesta que renueva la esperanza de tener un representante de la música local que no pase sin pena ni gloria. Sí, en Babelgam encontramos post punk, surf rock, algo de jangle e indie, géneros viejos que se han trillado a lo largo de las décadas –para bien y para mal– pero que en sus manos, en nuestro contexto en pleno 2019, adquieren nuevos significados.
Mar de Hiladas (2019), su EP debut lanzado el pasado mes de julio, muestra a un cuarteto que parece haber entendido el poder de la melodía. Y no solo entenderlo, sino saber usarlo en 6 composiciones que se quedan con facilidad en la memoria auditiva. Un equilibrio entre una estética sonora cercana al gris, característica del post punk revival, y la canción pop tradicional con coros que enganchan y ritmos que se siguen sin mayor esfuerzo.
Así pues, parece imposible no dejarse llevar por los bajos de Nicolás Cruz o por la siempre interesante e inquietante voz de Juan Tuaty en grandes canciones como Materia Oscura, Danza de Agujas o Túnel; o por el nuevo clásico de la noche alternativa Hikikomori, que le representó a la banda la rotación de su música en radio y otros medios especializados. Hasta Hiladas, un intermedio con aires trap que consigue conservar la estética propuesta por el proyecto desde el minuto cero sin desencajar en el todo del EP.
De esta forma Mar de Hiladas, como carta de presentación, promete. Y promete mucho. Ahora Babelgam tiene la responsabilidad de materializar todo ese placer y satisfacción que genera desde el estudio, en el en vivo. Así como lo logró en su concepto, encontrar en sus conciertos el equilibrio. Yo, aún con la esperanza renovada, cruzo los dedos para que así sea.