Apple, Google y Facebook buscan la vida eterna
Las cabezas de estas compañías premiaron con 3 millones de dólares a 11 científicos por su trabajo en la búsqueda de la cura de enfermedades como el cáncer.
Art Levinson, Sergey Brin, Anne Wojcicki, Mark Zuckerberg , Priscilla Chan y Yuri Milner son el grupo de multimillonarios y multimillonarias detrás de la fundación "Breakthrough Prize in Life Sciences" (premio al progreso en ciencias de la vida), con la cual buscarán fomentar la investigación en la cura de enfermedades como el cáncer, la diabetes, el Alzheimer y el Parkinson, y así extender la vida humana.
Serán 5 estímulos millonarios por año los que entregará esta nueva Fundación. El primero fue otorgado a 11 científicos estadounidenses, reconocidos en el campo de la genética y su aplicación en la investigación contra el cáncer y sus diferentes tipos.
Como miembros de tres de las más importantes empresas del mundo, Levinson, presidente de la junta directiva de Apple; Brin, cofundador de Google, y su esposa; Zuckerberg, cofundador de Facebook y su esposa, pretenden que su influencia sea clave en despertar el interés de otros científicos en el campo de la biología médica y que se avance más rápido en investigaciones similares.
Sin embargo, hay posturas en contra de este tipo de estímulos económicos y del propósito de este en particular. Como señala el bioestadista Bob O'Hara, en The Guardian, la realidad difiere de lo que sugiere Milner cuando afirma que uno de los objetivos del premio es que este tipo de científicos se mantengan en su campo y no lo abandonen por áreas más lucrativas, cuando los trabajos y posiciones para investigadores con posdoctorado son escasas y mal remuneradas.
Dice además O'Hara que es un insulto pensar que los científicos necesitan dinero para estar motivados en su profesión y en ayudar a la humanidad; también, que buscar la cura del cáncer es es un problema de naciones desarrolladas, mientras que hay muchas más enfermedades que requieren fondos y no estímulos para curarlas, sobretodo en países pobres, como la malaria y la tuberculosis.