La percusión caribeña y sus fusiones en el Drum Festival
La percusión es en Colombia, especialmente en el Caribe y el Pacífico, la instrumentación más representativa de las comunidades afrodescendientes. En el proceso de mestizaje se introdujo su sonoridad y se mezcló, en el Caribe, con las gaitas indígenas, formando los ritmos que hoy conocemos como parte esencial desde Punta Gallina hasta el Bajo Magdalena, entre ellos la tambora, el chandé, guacherna y fandango.
“La tambora es, en primera instancia, un instrumento musical de percusión que le da nombre a un grupo de aires (ritmos) regionales en el Caribe colombiano” cuenta Álvaro Rojano en su libro La tambora Viva (2013).
Entendiendo la percusión como uno de las bases en la musicología del Caribe, es comprensible que surjan propuestas culturales como el Drum Festival Barranquilla. Un evento que celebró su quinta versión del 2 al 6 de octubre, y en el que bateristas y percusionistas nacionales e internacionales, son invitados para formar parte de un evento teórico-práctico en el que participan más de 60 músicos en escena.
Durante 4 días los músicos se dieron cita en escenarios como el teatro José Consuegra Higgins, el gran malecón, y otros espacios culturales de la ciudad para compartir su experiencia e intercambiar conocimientos con percusionistas como Marcos López (Nueva York), Tomás Teherán Salgado de San Basilio de Palenque, homenajeado como portador del legado musical. Por Colombia también estuvo Roberto Camargo, José Barbosa, Rubén de la Hoz, Einar Escaf junto a Distrito y Álvaro Agudelo.
El Drum Festival es una iniciativa de los bateristas barranquilleros Einar Escaf, Israel Charris y Rodrigo Villalón, que impulsados por el deseo de enaltecer las manifestaciones culturales que se derivan del tambor, gestaron una idea que posteriormente se convertiría en el Drum Festival Barranquilla.
“Este es un festival de músicos, artistas, investigadores y docentes dedicados al arte del Tambor desde sus raíces folclóricas hasta sus expresiones más modernas como la batería (Drums). Tiene el propósito de llevar el tambor como expresión cultural y social a un nivel más académico, participativo e incluyente”.
Precisamente con esta intención el festival incluyó ens uprogramación una franja de participación para personas con limitaciones visuales y un taller para niños de diversos sectores de la capital del Atlántico y del departamento.
El cierre del Drum Festival se realizó en el Gran Malecón del Río con una mezcla de las sonoridades tradicionales del Caribe con la presentación de la Agrupación Las Alegres Ambulancias de San Basilio de Palenque, Marcos López y las fusiones contemporáneas del rock, funk y jazz de la agrupación barranquillera Distrito.