Cristina Lleras nos cuenta sobre el significado del Premio Luis Caballero
Entrevistamos a la Gerente de Artes Plásticas del IDARTES sobre este importante evento de arte que termina el 2 de noviembre.
La séptima edición del Premio Luis Caballero se ha realizado este año de manera diferente y más abierta que las que se han llevado a cabo desde 1996. Esta vez, lo que coincidió con "el trasteo" de la Galería Santa Fe del Planetario Distrital de Bogotá, fue aprovechado por el IDARTES para repensar, descentralizar y ampliar el alcance de este evento clave para el arte contemporáneo colombiano.
Lean sobre nuestro recorrido por el Premio
Por primera vez, el Premio sale a ocho espacios diferentes de exposición de la capital, como el Archivo de Bogotá y el MamBo, pero conservando la escencia de que el lugar de exposición debe ser modificado por los artistas in situ. Éstos museos y edificios patrimoniales de la ciudad, albergarán hasta el 2 de noviembre una muestra que modifica las esquinas, los pisos, techos y recovecos de sus edificaciones, expresando y contextualizando ideas sobre lo que pasa por fuera de sus muros.
"Las reflexiones que cada obra suscita en relación con el lugar que las alberga no son solo cuestiones formales sino políticas, sociales, narrativas, entre otras" dice Cristina.
Este año se presentan las obras de Consuelo Gómez (“Mesa Franca”), Manuel Quintero ("Dromos"), Mariana Varela ("Fracturas"), Carlos Castro ("Belleza accidental"), Fredy Alzate ("Quinta fachada"), Sergio Giraldo ("Espacios imperceptibles"), María Adelaida López con “La casa de los Reyes” y Jose A. Restrepo ("Ejercicios espirituales"), anunciado como el ganador el pasado 30 de octubre.
"Cada una explora lenguajes de intervención que pasan por la escultura, el peformance, el video, el dibujo; se expande la noción de lo que entendemos normalmente por cada una de estas técnicas, las complejiza", explicó Cristina.
Todas las obras se pueden visitar en un día siguiendo “La ruta del Caballero”, la cual recorre las ocho "sedes" físicas del Premio en espacios, barrios y museos emblemáticos de Bogotá, y también transita por los discursos de la ciudad subjetiva que proponen los artistas en sus trabajos. Con éste recorrido gratuito en bus, IDARTES invita a todos los bogotanos a visitar lugares que no siempre son tomados en cuenta, o que parecen destinados a otro tipo de actividades.
Cristina Lleras, gerente de Artes Plásticas del IDARTES, nos contó un poco más sobre el Premio, los cambios de esta edición, su significado luego de casi 20 años de realizarse, y las posibilidades creativas que supone para los artistas que se presentan a él en convocatoria pública.
"Se habló mucho de la “desaparición” del Premio. Pero aquí está, renovado."
Después de siete ediciones, qué debería saber la gente sobre el Premio Luis Caballero y qué significa para el arte contemporáneo colombiano?
El Premio es de carácter nacional y se mantiene como un apoyo a la creación e investigación artística, así como una plataforma para el reconocimiento de artistas de mediana y larga trayectoria. Esto es fundamental por varios motivos: por una parte, porque hay una concentración de estímulos y recursos para los artistas emergentes, por otra, porque los certámenes de las artes han virado hacia el modelo curatorial. De esta forma, el Premio responde a una necesidad real de diversificar las maneras en que los artistas acceden a este tipo de bolsas de trabajo que no pasan por el curador ni se enfocan exclusivamente en la categoría de arte joven. Esto les permite realizar proyectos ambiciosos que quizá no podrían llevarse a cabo de otra forma y proyectarlos en el ámbito nacional e internacional. Todo esto contribuye a enriquecer la escena del arte contemporáneo. Por otra parte, este Premio era conocido por los artistas, pero poco lo reconocían las personas que no están ligadas al campo del arte. Con estos esfuerzos de crear "La ruta del Caballero" buscamos justamente que distintos públicos llegaran a estos ocho puntos de la ciudad y establecieran un diálogo a partir de sus conocimientos y de su cotidianidad, con las obras.
¿Cuál es el propósito y el objetivo de realizarlo este año en ocho espacios diferentes, a diferencia de años pasados solo en la Galería Santa Fe?
La idea surge de una necesidad, pues ya no contábamos con la sede de la Galería en el Planetario de Bogotá. Por ello, la respuesta lógica fue no restringirlo a la sede temporal de la Galería, que tiene unas características muy específicas: una casa de principios de siglo XX adaptada como espacio para el arte, sino abrirlo a la posibilidad de que el artista escogiera su lugar de intervención. Pensando en el público, se organizó de manera que fuera un evento de ocho intervenciones simultáneas de manera que se pudieran ver todas las propuestas al mismo tiempo y hacer conexiones no esperadas entre una obra y otra. Adicionalmente, pensamos en la experiencia de recorrer la ciudad, visitar lugares que la gente no conocía y activar edificios patrimoniales.
¿Concretamente qué cosas positivas ha significado para el Premio Luis Caballero, en cuanto a posibilidades creativas y en cuanto a organización y producción, llevarlo a cabo en esos espacios?
Las prácticas que vinculan el arte y la ciudad son de vieja data. Sin embargo, aquí no hemos generado una continuidad en esta reflexión. Nos falta, por ejemplo, pensar y fomentar el arte en el espacio público (ojo, no entendido ni como monumentos ni necesariamente como rellenar la ciudad de esculturas), y crear una mayor relación entre el arte y los espacios que habitamos como ciudadanos. Entre otras cosas, este tipo de iniciativas producen una apropiación de lugares donde no esperamos encontrar expresiones artísticas.
¿Esperan que para la próxima edición se presenten más artistas a la convocatoria?¿Cómo lograrlo?
Seguramente había muchas reservas frente a este nuevo modelo, pero se mostró que funcionó. Se habló mucho de la “desaparición” del Premio. Pero aquí está, renovado. Como toda convocatoria, habrá que hacerle ajustes, pero para la siguiente convocatoria ya los artistas habrán visto las posibilidades, que son muy ricas.
"No hay una conexión entre la obra de él y lo que se propone por parte de los artistas participantes, pues tiene que ver más con lo que Caballero representó para una generación y su posicionamiento en la historia del arte colombiano."
"Dromos" de Manuel Quintero.
¿Qué relación existe entre la obra de Caballero y que el premio que lleva su nombre parta de la intervención de un espacio, ahora varios, por parte de los artistas?
El Premio se crea un año después de la muerte de Luis Caballero, a manera de homenaje. No hay una conexión entre la obra de él y lo que se propone por parte de los artistas participantes, pues tiene que ver más con lo que Caballero representó para una generación y su posicionamiento en la historia del arte colombiano.
¿Qué aporte al campo artístico tienen las ocho obras que se presentan?
Las reflexiones que cada obra suscita en relación con el lugar que las alberga no son solo cuestiones formales sino políticas, sociales, narrativas, entre otras. Cada una explora lenguajes de intervención que pasan por la escultura, el peformance, el video, el dibujo; se expande la noción de lo que entendemos normalmente por cada una de estas técnicas, las complejiza.
¿Cómo invitaría Cristina al público de Señal Radiónica a que visitara las exposiciones?
Cada obra nos ofrece algún elemento de resonancia con nuestra experiencia pero a la vez, la amplía. Así, hay elementos que nos pueden sorprender como una patrulla vuelta capilla; una mesa con una cuchara de grandes proporciones que se activa pero no nos ofrece más que su propio ruido; un ciclista que fracasa y un velódromo imposible de usar; el polvo que guarda la memoria de lo que dejamos de ser; un techo vuelto escultura; un viaje por montañas a través del dibujo; unas marcas amarillas que nos remiten a una ciudad de obstáculos, entre otras posibilidades. Para activar estas conexiones desarrollamos el material pedagógico La ruta del Caballero que busca justamente que, a través de acertijos y preguntas, las personas -chicos, jóvenes y adultos- se diviertan un rato, explorando su propia creatividad.