'Post Pop Depression': el regreso de Iggy Pop
El padrino del punk vuelve con nuevo disco ayudado por Josh Homme para reivindicar su legado y acercarse a las nuevas generaciones...
En la década de 1960 en medio del auge de la música (y la cultura) hippie; una banda procedente de Michigan llamada The Stooges sonaba de manera cruda y poco glamorosa, sus letras desesperanzadoras (bastante alejadas de los sonidos californianos de la época) combinaban con el estilo de su cantante: Iggy Pop, un hombre flaco, que solía salir al escenario con el torso desnudo, acostumbrado a tener un comportamiento poco ortodoxo, que se untaba comida en el cuerpo y algunas veces se provocaba cortaduras. Sus pequeños excesos fueron totalmente ignorados por el gran público. Desde el principio, estaba claro que su música no encajaba dentro del espíritu de la época.
En 1973, con algunos cambios en su formación y ya bajo el nombre de Iggy and the Stooges, sacarían su último y más influyente álbum: Raw Power. A pesar de ser un fracaso comercial y de tener malas críticas en su momento, se puede considerar a Raw Power como la piedra angular que inspiraría a toda la subcultura Punk estadounidense en años siguientes.
Cuando el punk apareció, Iggy fue clara Influencia en bandas como The Ramones, no solo en su música sino en la actitud. Nada hubiera sido lo mismo sin Iggy. Precisamente fue en el año de la explosión del punk (1977) cuano Iggy terminó de pasar a la historia con su disco Lust for Life ayudado por su amigo David Bowie. Ahí salieron temas tan importantes como The Passenger y la canción que le daba el nombre al álbum, la cual sería importante para la generación de los noventa al aparecer en la banda sonora de Trainspotting.
'Porno': la segunda parte de Trainspotting
Aunque siguió sacando música importante en los años ochenta y noventa, Iggy Pop fue volviéndose más un mito que un artista actual. Sin embargo este año apareció justo con un álbum que lo volverá importante para las nuevas generaciones: producido por Josh Homme y con la colaboración de Dean Fertita y el baterista de los Arctic Monkeys, Matt Helders; Iggy logró sacar un disco lleno de oscuridad, que habla de muerte y drogas, que combina muchos géneros y que sin duda tiene el fantasma de su amigo Bowie andando por ahí.
Iggy Pop no es solo el padrino del punk, es la representación del rock and roll en toda su expresión, con su excesos, sus glorias, sus ficciones y sus realidades. Volvió Iggy... ¡Larga vida al padrino!
Den click en la imagen para escuchar completo el Post Pop Depression