The Strokes: una discografía para redescubrir
Desde su aparición a principios del siglo XXI, The Strokes ha sido una de las bandas más influyentes y fundamentales en el rock contemporáneo...
En su momento fueron considerados como los “Salvadores del rock” ya que su rockandroll eléctrico que nos recordaba desde los Velvet Underground hasta los Ramones, chocaba con el metal y el hardcore rap de la época.
Desde ese momento hasta hoy, el quinteto neoyorquino ha evolucionado de aquel formato guitarrero a experimentar con géneros como el funk y el Synth Pop. De hecho su cantante Julian Casablanca ha mutado de aquella voz rasgada y visceral a una mucho más aguda y dramática.
La discografía de The Strokes ha ido evolucionando con el siglo, mostrando álbumes de distintas tonalidades. Con el lanzamiento su nuevo EP Future, Present, Past, vale la pena darle una mirada a los trabajos anteriores del quinteto:
The Modern Age EP (2001): el primer trabajo de la banda fue un EP que incluía temas que serían importantes más adelante como Last Nite o Barely Legal pero en otras versiones. Un pequeño aviso de lo que vendría.
Is This It (2001): la revista NME consideró este álbum el mejor de la década, mientras la revista Rolling Stone lo consideró el segundo. Esto habla de la importancia de un álbum fresco, frenético, y que le devolvió sus raíces al rock sin perder su lado pop. Uno de los mejores álbumes de los últimos años.
Room On Fire (2003): aunque no tuvo el impacto de su antecesor, Room on fire fue una gran continuación Is This It y una máquina de hits como Reptilia y 12:51. La banda demostró que era mucho más que un grupo de niños bonitos con un buen disco.
First Impressions Of Earth (2006): este fue el primer álbum donde la banda empezó a alejarse de a poco de su sonido original y empezó a buscar nuevos caminos que incluyeron desde pop hasta Heavy Metal. Un disco exitoso que sin embargo careció de la solidez de los otros.
Angles (2011): pasaron 5 años para que la banda sacara un nuevo álbum (su lapso más largo sin hacerlo) y no decepcionaron. Acordes a los tiempos, este álbum marca definitivamente un nuevo sonido, y aunque hay un par de guiños a sus épocas rockeras, es un disco que combina muchos géneros y con mayor influencia de sintetizadores. Muchos dicen que es su segundo mejor álbum.
Comedown Machine (2013): el último álbum completo de The Strokes mostró su obsesión por el synth pop ochentero, casi olvidándose del rockandrol. Recibido fríamente tanto por la crítica como con el público, Comedown Machine es el disco más experimental del quinteto. Tal vez se necesiten algunos años para comprenderlo mejor.
Future, Present, Past EP (2016): en un interesante ejercicio la banda vuelve con un EP de tres canciones que representa tres momento: Drag Queen (futuro) Oblivious (presente) y Threat of Joy (pasado). De esta manera hacen una reflexión sobre sus distintas etapas dándonos tres temas más que interesantes y dejándonos la idea que la búsqueda por nuevos sonidos seguirán.
Para ustedes... ¿Cuál es el mejor álbum de The Strokes?