De "Colombia Caribe" a 'Wanderlust', ¡regresa Francisco Zumaqué!
Con un bagaje que recorre de la música clásica a la música popular del Caribe colombiano, el cereteano Francisco Zumaqué ha hermanado la música en una sola.
El compositor, arreglista y cantante Francisco Zumaqué Gómez generó una amalgama de influencias que se refleja completamente en su obra, dentro de las que se encuentran piezas de sonido tropical, composiciones pioneras del jazz moderno en Colombia y una serie de opus que conforman una obra sinfónica y de cámara sólida y personal.
Francisco Zumaqué es un patrimonio de la música colombiana. Es, en palabras de Jaime Monsalve, “el alma de la música caribe”. Es uno de esos creadores que con su talento y calidad humana iluminan el rico panorama de la música nuestra, caracterizada por la diversidad y multiplicidad de formas y de ritmos.
El maestro de música de cámara, jazz y música popular se ha desempeñado como compositor y arreglista en los campos de la música académica y popular.
En el marco de la inauguración del estudio de RTVC en Barranquilla, desde Radiónica conversamos con Francisco Zumaqué sobre su obra musical, que esta semana, además, presenta su proyecto de latin jazz en el marco del Barranquijazz Festival.
Comencemos hablando de esa composición icónica suya de "Colombia Caribe", cuéntenos maestro, ¿cómo nace esa composición que, además, desde hace tanto tiempo se mantiene vigente, sobre todo cuando coinciden los partidos de la Selección Colombia?
Lo primero que nació de esta canción fue el coro con la frase famosa “Sí, sí, Colombia. Sí, sí, Caribe” y nació hace muchísimo tiempo en épocas más difíciles para el país a nivel internacional y, de alguna manera, para sentir el orgullo de ser colombiano y se me ocurrió que era importante el colombiano de a pie, la gente honesta, correcta, los hombres y mujeres que se sintieron de verdad orgullosos de ser colombianos y además de reafirmar la identidad Caribe en una época en la que no se veía tan aceptada desde el interior.
Surge “Sí, sí, Caribe, sí, sí, Colombia” inicialmente, pero muy rápidamente vino la melodía y todo el espíritu de la canción ya estaba ahí en mi mente, en mi alma, en mi conciencia. Más adelante, cuando me invitaron al festival de música del Caribe, el “Mono” Escobar, con su elocuencia conocida, me cuenta cómo era la llegada de los grupos, con la algarabía, con la alegría de sus tambores y con sus instrumentos a poblar el mundo musical de Cartagena, a llenar de vida y de música todo el Caribe…
Ahora bien, ese fue el inicio de la canción. Años más tarde, en Barranquilla, Edgar Perea usa ese llamado de “sí, sí, Colombia” como un elemento de regocijo, de jolgorio y de alegría cuando la Selección Colombia metía un gol o hacía algo extraordinario, bello futbolísticamente. Y pues eso fue acogido inmediatamente por todos los comentaristas deportivos y por los fanáticos del fútbol. Estoy muy contento de que el pueblo me haya honrado recibiendo la canción con tanto beneplácito, con tanta alegría y que se hayan apropiado de ella, porque las canciones son para que la gente se apropie de ellas…
Sin duda alguna, sus composiciones están atravesadas por ese sentimiento caribeño, que nos caracteriza a todas las personas que nacemos en este Caribe y que ahora se escucha en ese último trabajo que nos ha presentado en este trabajo titulado Wanderlust, en el que encontramos desde percusiones tradicionales, groove, latin jazz, hablemos un poco cómo ha sido ese tan difícil, pero supongo placentero trabajo de reflejar a través de la música su amor por el jazz y la música popular
Bueno, Wanderlust, entre otras cosas, significaba el amor por viajar y es cierto como una pasión porque a mí me encanta viajar... yo he vivido viajando por Europa, Asia, América, pero no fue sino cuando una amiga en una conversación sugirió este nombre para este proyecto. Yo lo acogí, no solo porque a mí me gustara viajar, sino por la sonoridad de la palabra y también porque a mí me gusta viajar por los mundos musicales, o sea, me encanta la música folclórica, desde luego música popular y también la música de cámara, la música sinfónica, la música coral y estoy siempre trabajando con distintos, géneros y ritmos y elementos.
Me gusta viajar también en el sentir de las culturas, y conocer a fondo, y ofrecerle al público que conozcan un poco la visión que yo tengo de la música; por ejemplo, de la música popular campesina, como puede ser un fandango. Esta viene siendo una visión universal del Caribe, finalmente como algo apasionado.
Esta semana va a suceder algo que muchos barranquilleros estaban esperando: su presentación en el Barranquijazz Festival, la población barranquillera finalmente escuchará su propuesta enmarcada en un formato de teatro
El evento no es un concierto más, no hay un repertorio preestablecido. Les confieso que aún hoy estoy trabajando, no solamente buscando la manera de cómo organizar y reescribir los temas que me interesaría presentarle al público barranquillero y costeño, y ojalá nacional… No va a ser un concierto común y corriente, es un concierto muy especial.
Yo siempre tengo en cuenta las características interpretativas de cada músico y cómo pueda él o ella mostrarse mejor. Es un homenaje a cada uno de los intérpretes, o sea es la oportunidad de mostrarlo y de decir, "señores, estemos orgullosos de nuestros músicos en Colombia". Desde el punto de vista del repertorio, este es un homenaje a la gran diversidad de nuestra música, sobre todo la música en los distintos aspectos rítmicos orquestales y eso es lo que va a ocurrir ahí… O sea, una sorpresa detrás de otra sorpresa, un elemento espectacular detrás de otro es decir, yo me preocupo de cada detalle en el concierto y que la gente pueda disfrutar todos los aspectos, no solamente una buena melodía o una buena improvisación, sino contrastar todo el tiempo la acción en el escenario.
En Radiónica nos preocupamos por darle visibilidad a los músicos jóvenes y a las bandas emergentes que están haciendo experimentos sonoros desde distintas regiones del país, ¿qué mensaje da a estos jóvenes músicos que siguen este camino?
Primero, felicitarlos por atreverse a experimentar porque yo creo que es necesario, incluso equivocarse y aprender. Así se le puede dar cosas nuevas al público. Aunque esa sea una manera un poco negativa en esa búsqueda, al final es más lo positivo. Yo creo que es loable y deben seguir por ese camino. Sin embargo, creo que sí es importante que continúen, paralelamente, educándose y sigan construyéndose con su conjunto, porque la formación permite explorarlo todo.
Y es eso lo que te da el paso para realizar un trabajo bello, si tú manejas de manera precisa tu instrumento en la composición, en la orquestación, en todos los elementos que determinan el ser músico realmente, pues es permitir que te expreses libremente porque la técnica y los conceptos no te van a detener. Y finalmente, creo que hay que ser lo más auténtico posible, que tú, que tu ave espiritual, vuele alto y logre llegar a la de una expresión verdadera y bella que refleje tu alma, tu espíritu y tu ser interior.
Este viernes, 13 de septiembre, Francisco Zumaqué presentará su ensamble de Latin Jazz en el Teatro José Consuegra Higgins a las 8:00 pm en el marco del Barranquijazz Festival.