"Creo que el arte se sigue moviendo dentro de la marginalidad": Andrés Ospina
A mí la palabra independencia me genera muchas dudas, porque me parece que en algún momento y en sociedades muy desarrolladas desde el punto de vista creativo tenía mucho sentido. Digamos que en la Inglaterra de los 60 o en los 70 se hablaba de independencia porque había una gran cultura mainstream que se reconocía como la gran cultura, la cultura mayoritaria y una cultura minoritaria o una cultura underground, una cultura subterránea como se dice.
Creo que eso funciona dentro de una sociedad desarrollada y que puede aludir a la gente que no está vinculada con grandes círculos de poder en la producción cultural, pero me parece que en el caso de Colombia y en un contexto como el nuestro, hablar de eso es bastante complicado porque finalmente yo creo que el arte se sigue moviendo dentro de la marginalidad, de manera que me parece riesgoso utilizar el término ‘independiente’ porque finalmente seamos grandes o pequeños pues todos estamos jugando a lo mismo y es a tener un lugar en lo que se conoce como la industria de producción cultural.
¿Por qué no hay un mercado autosostenible de la cultura en Colombia?
Yo creo que finalmente es una de las tristes consecuencias del tercermudismo, que no son pocas; sabemos que en una sociedad a la que digamos le competen prioridades mucho más complejas o mucho más inmediatas, según entendemos, distintas al arte o distintas a la producción cultural, distintas al entretenimiento; el asunto de hablar de generar una industria con fortaleza pues resulta muy difícil, además yo creo que no solamente en términos de producción cultural sino en términos de producción de otra índole sucede lo mismo, y es que no somos una sociedad muy exportadora de cultura ni muy exportadora de cosas sino muy importadora; hemos sido mucho más consumidores, hemos tenido muy poca fe en lo nuestro, no ha habido una política cultural seria de parte del Estado en torno a cómo se podría solucionar eso y eso nos lleva a que seguimos siendo principalmente un país consumidor de cultura más que productor de cultura y yo creo que un país acomplejado también.
La construcción de un mercado cultural independiente en Colombia yo creo que es una empresa en la que se ha venido trabajando desde mucho tiempo atrás, creo que la autogestión, que es un asunto que constituye uno de esos elementos vitales para que ese mercado se vaya consolidando, es algo en lo que se viene trabajando desde tiempo atrás. Bien sabemos que en la música, por ejemplo, se hace prensaje independiente desde hace más de 50 años, que el sector editorial ha hecho lo mismo por otro lado y que ahora con el tema de los nuevos mecanismos de divulgación de la producción artística eso está sucediendo.
Me parece que deberíamos conocernos mejor entre todos, toda la gente que está creando, consumiendo o divulgando la cultura debería estar más pendiente de eso para darle cierta solidez al tema y trabajar más como un bloque cultural (sé que suena un poco pretencioso) que trabajar como unas islas.
Unidos yo creo que se puede hacer mucho. Y creo que en Colombia mucha gente está trabajando por eso, digamos que no es un proceso nuevo para nosotros y que hemos venido haciendo con cierta fortuna. Y hay unos ejemplos muy buenos y muy positivos en ese sentido