Adiós Chester Bennington...
Tristemente las noticias de suicidios no impactan solo por la naturaleza del hecho, sino también porque tienden a opacar o quitarle valor a muchos aportes y huellas que sus protagonistas logran dejar en vida. Así homenajeamos a Chester Bennington.
Hablando del mundo de la música, hoy hacemos referencia al fallecido cantante norteamericano Chester Bennington, integrante de la agrupación de neo metal alternativo Linkin Park, quien esta semana fue carátula de varios medios tras ahorcarse en su casa en Palos Verdes, California.
Era el año 2013 y la noticia tomaba por sorpresa a más de uno, la banda alternativa grunge Stone Temple Pilots regresaba al ruedo con un EP que presentaba en la voz a una joven figura destacada dentro de la generación inmediatamente siguiente a los STP. Era claro, la razón para que Chester fuese el elegido era su potente y melódica voz, junto a una clara admiración e influencia que tenían en su desarrollo artístico los Pilots.
Muchos pensamos que era algo arriesgado pero consecuente, no en vano Linkin Park ya era todo un éxito y representaba el relevo en materia de rock con aires comerciales para la radio de comienzos del siglo. Era una bala de oxígeno que mantenía la atención de los jóvenes y las emisoras sobre sonidos alejados del pop, llenos de riffs de guitarras, atmósferas electro rock, beats y flow de rap perfectos para la década.
Lamentablemente ese nuevo aire para Bennington y el grupo no duraría mucho, realmente la crítica lo recibió tímidamente y en general, el momento para esa mezcla casi perfecta ya había pasado. Adicionalmente el continuo trabajo que tenía Linkin Park para esa época también presionó la decisión del cantante para abandonar el proyecto, tan sólo dos años después de haber iniciado ese camino.
Dejando de lado la sorpresa de esta semana, no en vano la banda comenzaba una gira norteamericana el 27 de este mes (julio). Era sabido que Chester tenía problemas de depresión desde su adolescencia. Sus temores y demonios habían estado presentes a lo largo de su carrera con la banda desde el año 2000, y recientemente habían sido avivados por la llama del dolor que le había generado el también suicidio de su amigo cercano y padrino de sus hijos, Chris Cornell (Soundgarden) hace un par de meses. Curiosamente el día seleccionado para quitarse la vida fue el mismo en el que Cornell cumpliría 53 años de edad.
Sus aportes al grupo fueron siempre claros, y siendo muy concretos, era la voz de Chester la que ayudó a diferenciar a Linkin Park de muchos otros grupos de la costa oeste norteamericana que exploraban por caminos y formatos similares durante la misma época. Por un lado su aporte melódico y color de voz hacía que las canciones se abrieran a horizontes amables, radiales, cálidos; mientras que por el otro lado, sus gritos, bien fueran de rabia o desespero, enriquecían al grupo y lo mantenían en una línea entre lo comercial y algo un poco más agresivo underground.
Su legado en el mundo de la música básicamente está respaldado por siete discos en estudio, dos premios Grammy y la venta de más de 68 millones de copias en el mundo con Linkin Park. También realizó varias participaciones con otros artistas y presentaría otro disco con un proyecto paralelo llamado Dead By Sunrise en el 2009.
Aparte del trabajo de vanguardia y la minuciosa producción del grupo en su momento, el guiño y mashup con el hip hop junto a artistas como Jay-Z, hicieron que la banda y sus músicos ganaran gran respeto entre muchos fanáticos de varios géneros y en la industria musical en general.
También popularizó mucho su trabajo y color de voz, los temas que se incorporaron como banda sonora oficial para las películas de regreso de Transformers a la pantalla grande durante este milenio. Me refiero a los sencillos New Divide y What I’ve Done.
Como si fuera un presagio, el último disco de Chester con Linkin Park fue editado este año, se llama ‘One More Light’, una muestra clara y madura del manejo vocal que planteaba para este nuevo capítulo con el grupo. Curiosamente el sencillo que promociona el álbum corresponde al nombre de Hablando Conmigo Mismo.
Sin embargo, hay algo que queda muy claro, su partida deja muchas más preguntas que respuestas…