'Call Of Duty Modern Warfare': Un campo de batalla actualizado
El pasado 25 de octubre, los estudios Infinity Ward bajo la conocida distribución de este veterano publisher, realizaron el lanzamiento oficial de Call Of Duty: Modern Warfare. Un título que como su nombre lo indica hace ‘reboot’ de dicha serie, llevando la acción a escenarios contemporáneos que tienen en cuenta la situación geopolítica mundial.
Desde el año 2003 esta franquicia se apoderó con ahínco de uno de los gremios gamers más competitivos y exigentes, siendo Modern Warfare una de las entregas más esperadas por sus componentes diferenciadores.
Si bien, Call Of Duty ha tenido una competencia reñida frente a otros grandes titanes como Battlefield, su denominado campo de batalla moderno también debe actualizarse según la manera en que el planeta se va transformando. Aquí la historia se centra en un personaje no jugable y altamente reconocido como el Capitán Jonathan Price, quien siendo una de la últimas esperanzas de la CIA, deberá hacer frente desde varias latitudes a una amenaza terrorista llamada Al-Qatala y su líder Omar Sulaman ‘El Lobo’.
Price junto a la resistencia de la turbulenta nación ficticia de Urzikistán, liderará una serie de operaciones al lado de otros soldados de élite (‘Alex’ y Kyle Garrick), para así evitar los planes de esta organización, todo dentro de un conflicto lleno de tensiones políticas con Rusia y un atentado a gran escala contra territorio británico.
Operaciones, relatos y diversos escenarios
Esta nueva entrega se destaca por presentar un componente claro en términos inmersivos, ya que busca llevar a los jugadores hacia nuevos niveles para que se sientan literalmente dentro de un campo de guerra o en una operación encubierto. Las dinámicas argumentales nos conducen por varios momentos y entornos, la idea es sentir la adrenalina sin importar la cantidad de recursos que se posean, ya que nos están narrando una historia atrapante llena de giros, donde las decisiones rápidas y la táctica están a la orden de cada partida.
Con mucha versatilidad estos relatos se van entretejiendo con otros elementos de jugabilidad, los cuales por nada del mundo hacen de esta una oportunidad lenta o aburrida. Todos sus comandos resultan ser altamente intuitivos, desde desenfundar un arma hasta apuntar un láser para que el apoyo aéreo sepa dónde debe lanzar sus misiles. Diseños reales en los que no solamente se puede experimentar lo descrito, también la opción de pilotar vehículos remotos como drones, utilizar gafas de visión nocturna y hasta máscaras de gas en caso de amenazas químicas.
Sin duda una experiencia muy rica, pero que por momentos -como le ocurre a muchos de estos títulos en modo campaña- se comienza a volver repetitiva debido a que únicamente ofrece una estructura lineal en las misiones, por lo cual descubrir los patrones se convierte en algo netamente cíclico relacionado a la cantidad de intentos.
El ganador será el que controle el caos
El elemento más apreciado de esta entrega de Call Of Duty se relaciona con los enfrentamientos en modo multijugador, ya que sigue ofreciendo una ruta entretenida y ágil para usuarios exigentes, quienes a través de sus recursos abordan los más interesantes escenarios y prueban sus habilidades competitivas. Para esta oportunidad la acción se centra en 5 modalidades de juego fijas, además de una aleatoria y otra privada, donde incluso pueden llegar a enfrentarse hasta 64 jugadores de forma simultánea con opción multiplataforma para usuarios de Computador, Xbox One y Playstation 4.
Dichas confrontaciones se vuelven aún más atractivas ya que permiten a cada jugador manejar su propio perfil de combate, accediendo así a varios tipos de equipamiento entre asalto, táctico, francotirador, demolición y apoyo pesado. Algo que permite idear otros modos de estrategia de acuerdo a los entornos, siendo viable luchar en campos abiertos y lugares encerrados, desde destinos desérticos hasta urbes en caos.
El tema de la personalización sigue latente para que los usuarios desarrollen su propia reputación en las confrontaciones online, optando por una amplia galería de personajes y soldados, quienes a su vez integran dos bandos designados como ‘Coalición’ y ‘Unión’. Además, esto se convierte en un elemento atrapante debido a la capacidad de ganar puntos de experiencia, desbloquear desafíos, obtener recompensas y personalizar arsenales gracias a las alternativas de su tienda dedicada en línea.
Como si prácticamente existieran tres juegos dentro de un mismo contexto (Campaña, Multijugador y Cooperativo), Call Of Duty: Modern Warfare es en definitiva uno de los títulos más esperados del 2019. Una producción que ha entusiasmado a miles de fanáticos alrededor del mundo, que al igual que ocurre con las anheladas entregas anuales de otros juegos de tipo deportivo, siempre estarán ansiosos año tras año por corroborar que novedades y posibilidades aterrizan en estos enfrentamientos.
Si usted busca vivir momentos realistas, sobre todo por lo que significa estar en un campo de batalla, no tenga dudas frente a este capítulo de Call of Duty. Un juego que puede llegar a satisfacer a jugadores con diversos intereses, desde los que desean una buena historia hasta aquellos que buscan competir de forma puntual.