'Ozark': Reseña - Cuarta Temporada, Primera Parte (Sin Spoilers)
El 21 de enero llegará la primera parte de la cuarta y última temporada de Ozark. Serie de amplio reconocimiento, la cual en diversas oportunidades hemos referenciado, ya que desde su debut en 2017 se ganó un importante título a pulso al ser considerada como una de las herederas directas del caótico estilo ideado por Breaking Bad. Su factura de alta calidad ha evidenciado un intrincado drama familiar en el que si todas las cosas van mal, puede llegar a estar peor.
Desde la temporada anterior…
La tercera entrega de Ozark estuvo ambientada por un contexto complicado. Primero fue estrenada a tan solo unos días de que arrancara la pandemia global del Covid-19 y segundo, sus acontecimientos demostraron que la dicotomía de Marty y Wendy, entre ser buenos padres y estar forzados a ser criminales en un complicado juego, no tiene otra finalidad más que sobrevivir a toda costa, ya que enfrentaron grandes y peligrosos enemigos cada uno con intereses distintos: La mafia KC en Kansas City, Darlene Snell y su interés por regresar al negocio, la encrucijada de Maya Miller junto al FBI por vigilar los negocios de los Byrde y como si fuera poco, Omar Navarro y su cartel en una guerra del poder desde México hasta los Estados Unidos.
El episodio 30 de la serie dejó a todos los televidentes en vilo durante un periodo casi que de dos años. Una vez más, las profundas aguas del Lago de los Ozarks siguen siendo tan oscuras como el alma de cada uno de sus protagonistas. Marty y Wendy sobrevivieron a lo peor, pero las cosas se pondrán todavía más enredadas ya que si bien Omar Navarro se deshizo de sus rivales en la guerra de los carteles, ahora anhela quedar libre de cargos y eso solamente lo logrará con los Byrde en territorio estadounidense.
Una montaña rusa en bajada a punto de descarrilarse
El desafío para esta pareja (dispareja) de esposos se vuelve aún más espinoso, donde era más que evidente desde los acontecimientos anteriores que las reglas de juego cambiarían. El principal factor recae en la muerte de Ben, el hermano de Wendy, quien luego de su forzoso asesinato evidenció por un lado lo peligrosa que puede ser su hermana, pero por otro que tanto Ruth Langmore, la fiel mano de derecha de Marty y Jonah, y el hijo menor de los Byrde están dispuestos a tomar otros caminos. Simplemente es una búsqueda compartida por la venganza, la traición y una insospechada justicia que por supuesto, no se logrará a través de los medios más amables.
Las heridas por la muerte de Ben siguen abiertas y continúan sangrando, lo cual derivará en un nuevo y renacido conflicto entre “La Granja Snell Vs. El Imperio de los Byrde” por tener el control de Ozark. En esta contienda terminarán por unirse no solamente todas las partes ilegales que buscan un trozo de pastel, sino también varios personajes nuevos como los son Javier Navarro, el caprichoso y corrupto sobrino de Omar Navarro quien desea ser el sucesor de su cartel, junto a un misterioso y tramposo detective privado llamado Mel Sattem, quien en su búsqueda por saber sobre el paradero de la abogada Helen Peirce, comenzará a enemistar aún más a todos los actores y de paso irá descubriendo muchos secretos que debieron quedarse ocultos para siempre.
Los Byrde buscarán a toda costa la manera de que Omar Navarro logre una amnistía para que así pueda empezar una nueva vida, transparente y honesta. Algo que en primera instancia parecería un disparate imposible de conseguir, pero que a la final se irá desarrollando en la medida que tanto Marty como Wendy, pongan a jugar sus fichas de forma inteligente, utilicen a sus aliados más conocidos y eventualmente, logren hacer nuevos pactos que complicarán no solamente la estabilidad de los negocios, sino además la tranquilidad de la región y la unión entre las familias.
Veredicto en primer término
Claramente, el estreno de esta última temporada en dos partes obedece a una intrigante e inteligente estrategia, la cual nos va a permitir ver los primeros 7 episodios de un cierre en el cual solamente se puede muestra la punta del iceberg. Atrapantes uno a uno, cadenciosos y con muchas confabulaciones, al final habrán más preguntas que respuesta, por ende y es obvio, nos vamos a quedar con incertidumbres frente a la historia y con ganas de más, pero habrá que esperar un poco y ojalá no mucho para ver los 7 capítulos restantes.
La fecha de la segunda parte aún no está confirmada, pero, lo único que podemos asegurar tras lo previamente descrito, es que estamos en la ruta de clausura de una de las producciones más exitosas de Netflix de los últimos 5 años. Muy seguramente su historia cargada de dicotomías y paradojas traerá un final completamente inesperado en el que saldrán reflexiones acerca de lo justo, lo correcto y lo inevitable, porque cada acción trae consecuencias que para el caso de esta serie llegan a ser irremediables.