Playas sin afán: cinco destinos turísticos “no tradicionales”
Llegó diciembre, mes de vacaciones, ¿y qué mejor plan que recorrer las playas de Colombia? Pero no las que todo el mundo conoce ni que se llenan de gente, hoy les tengo un listado de las mejores playas “no típicas” para disfrutar en esta temporada.
Archipiélago de San Bernardo
Foto: Wikimedia Commons por Cristianpherrera
"Usted ha llegado al fin del afán, disfrútelo" es el aviso con el que reciben a los visitantes en el archipiélago de San Bernardo, un conjunto de 10 islas costeras ubicadas en el golfo de Morrosquillo, en el mar Caribe. Está compuesto por las islas Boquerón, Palma, Panda, Mangle, Ceycén, Cabruna, Tintipán, Maravilla, Múcura y Santa Cruz del Islote (récord mundial de densidad de población por metro cuadrado).
Es una joya escondida en el Mar Caribe. Se puede hacer un recorrido por todas las islas y enamorarse de cada una. Hay hoteles de 5 estrellas y hostales muy económicos por lo que es un paraíso para cualquier bolsillo. No hay turismo masivo así que es un lugar para a cercarse a la naturaleza, a la calidez del trópico y de los caribeños, que además son personas tranquilas, orgullosas de su paisaje y de su cultura, y muy atentas con el turista.
Por su biodiversidad subacuática parte del archipiélago pertenece al Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo. Lo que convierte al buceo en una de las actividades más apetecidas entre expertos y principiantes.
A este paraíso solamente se puede llegar en lancha. Desde Cartagena, Bolívar salen varias desde el Muelle de los Pegasos, entre las 8 y las 10 de la mañana. Desde Tolú, Sucre también en el mismo horario.
Capurganá
Fotos por: Valeria A. Luna.
Sí señores, Colombia cuenta con playas hermosas y una de esas es Capurganá, en el Chocó. Es un corregimiento en el golfo de Urabá, que está prácticamente al borde de la frontera con Panamá, un sitio de escenarios paradisiacos en donde se entremezclan acantilados, bahías de corales y aguas cristalinas, entre el mar y la Selva del Darién. Es bellísimo y poco explorado.
En la zona pueden observarse variedad de corales, peces de arrecife y paisajes marinos en excelente estado de conservación. De abril a junio pueden observarse hermosas tortugas marinas entre ellas la caná y la carey, quienes vienen a estas costas a dejar sus huevos los cuales eclosionan entre junio y julio cada año.
Es necesario tomar una lancha en Acandí para llegar a Capurganá. El recorrido dura 40 minutos navegando por la Costa Darien con paisajes bellísimos que se guardan en la memoria.
Obligatorio en Capurganá: visitar la cascada del Cielo con sus caídas de agua entre la selva e ir a la piscina natural. Un viaje que vale completamente la pena.
Bahía Concha
Foto tomada de Commons Wikimedia por Javadumper
Queda en el Magdalena y la tranquilidad que se respira ahí es algo único. Es el propio sitio para “recargar pilas” ya que es perfecta para desconectarse y disfrutar de la vida al natural. No es tan concurrida como otras playas de Santa Marta así que si buscas un lugar relajado, sin bulla y con paisajes bellos, este es el sitio. No tiene olas y es bastante profunda, así que se puede apreciar gran vida marina. Es ideal llevar careta, snorkel y aletas para “caretear” un rato.
Es de fácil acceso así que se puede llegar en transporte público y en carro. Hay parqueaderos y zona de camping.
Bahía Solano
Foto por: Jhon Fernández.
Es la cumbre del ecoturismo en el pacifico. Está rodeada por una gran selva húmeda y tiene cascadas que se dirigen al mar. Sus playas son extensas y de arena rojiza, lo que hace que el paisaje sea muy colorido. Sus suelos son de origen volcánico y hay manantiales de aguas termales.
Se dice que es la ensenada natural más hermosa de Colombia y que puede ser la Puerta del Pacífico. La riqueza de esta selva tropical es reconocida por la megadiversidad de especies animales y vegetales que alberga.
Bahía Solano es un lugar muy visitado por diferentes tipos de animales. De julio a noviembre se pueden ver tortugas; de agosto a septiembre, ballenas Jorobadas; de septiembre a enero, aves endémicas, y durante todo el año hay delfines en la playa. Ir a Bahía Solano es tener una experiencia fabulosa e inigualable.
No es tan fácil llegar a este paraíso natural porque aún no cuenta con apropiadas vías de acceso, debido a las características topográficas de la zona, pero se puede ir hasta Buenaventura y desde ahí continuar el recorrido por lancha.
Cabo de la Vela
El Cabo de la Vela es un paradisíaco lugar, donde exóticos escenarios desérticos contrastan con el azul intenso del mar. Es hermosísimo. Está en la alta Guajira y es sin duda un destino inigualable que nadie debe perderse de conocer, además de ser un lugar ideal para el turismo ecológico y de aventura.
El viento es muy fuerte, lo que permite noches muy despejadas donde constantemente se aprecian estrellas fugaces y se disfruta de bellos atardeceres.
Se debe ir en un buen carro a Cabo de la Vela, la vía no está pavimentada y hay trampas de arena en el camino. La recomendación es ir con personas que conocen el camino para llegar, hay varios servicios de transporte directos.