“Somos la mayoría silenciosa”: La emisora feminista de Arabia Saudita
Con el lema "somos la mayoría silenciosa", desde hace poco más de un mes, un equipo de alrededor de 25 voluntarias, oriundas de Arabia Saudita y otros países, se reúnen de manera clandestina cada semana para grabar un programa de radio que alza la voz contra un reino ultraconservador y una sociedad machista.
Quienes dan vida a Nsawya FM, como se bautizó este proyecto, y que significa Feminismo FM en árabe, no estudiaron periodismo, pero mediante sus experiencias y su mirada buscan ayudar a otras mujeres. Con su parrilla de contenidos, aún en construcción, quieren poner sobre la mesa el acoso sexual, la persecución a las activistas en Arabia Saudita o la petición de acabar con la tutela del varón, que da al hombre la autoridad para tomar decisiones sobre ellas en asuntos como si pueden o no viajar al extranjero, someterse a una intervención quirúrgica, casarse, alquilar un apartamento, matricular a sus hijos en un colegio, abrir una cuenta bancaria, entre otros.
Incluso, cuando el pasado mes de junio un decreto real eliminó la prohibición de conducir, varias de las activistas de esta iniciativa terminaron igualmente en la cárcel con cargos que incluyen "haber mantenido contactos sospechosos con países rivales" y que podrían desembocar en sentencias de 20 años. Una situación que no se ha podido reversar pese al pronunciamiento de numerosas organizaciones no gubernamentales -aunque ignorada por la comunidad internacional. Es así como destacadas defensoras de los derechos de la mujer saudí como Loujain Alhatloul, Iman al Nafyan o Aziza al Yusef, permanecen entre rejas.
Loujain Alhatloul, Iman al Nafyan y Aziza al Yusef
Es por esto que en los primeros programas de Nsawya FM, se centraron en la violencia de género como fenómeno encerrado en las cuatro paredes del hogar. Esto, con el fin de brindar herramientas a las oyentes para enfrentarse al acoso. También han perfilado la vida de saudíes fuera del país y su esperanza de regresar algún día.
Buscan de esta manera llegar a esa mayoría silenciosa formada por mujeres de clase trabajadora que tienen que soportar una vida cotidiana que continuamente les roba sus derechos y la capacidad de decidir sobre su destino. Saben que su público objetivo está sentado en sus casas, a la sombra, sin poder expresar su indignación y desesperación. Por esto, afirman que en Arabia Saudita las feministas existen, así no salgan en las redes sociales, o hagan parte de la proliferación de imágenes que se difunden desde el régimen que muestran mujeres cercanas al poder. Su compromiso, es con lo que llaman el rostro real de la situación que viven.
Con su rudimentarios recursos, y desde el anonimato, han ido captando la atención de muchas personas, y el programa ya cuenta con más de 4.000 seguidores en Twitter. Esperan seguir creciendo al ritmo de sus oyentes y sus aportes. Y claro, no han pasado desapercibidas para las autoridades y los sectores más recalcitrantes de la sociedad saudí, que han buscado obstruir el enlace web desde el que emiten y han denunciado la cuenta de Twitter. Saben que hay un temor al cambio, y que una porción de la sociedad no quiere perder sus privilegios, pero ellas están dispuestas a dar la lucha.