¿Qué está haciendo la industria musical por el medio ambiente?
¿Sabían que cada minuto se compran un millón de botellas de agua en el mundo?
Según datos arrojados por el medio especialista en investigaciones de mercado Euromonitor International, solo en el año 2019 se vendieron más de 480.000 millones de botellas de agua en todo el mundo, lo que equivaldría a la mitad de la Torre Eiffel que tiene 324 metros de altura y, con ese ritmo de compra, el Cristo Redentor de Río de Janeiro podría quedar enterrado bajo esta cantidad de botellas.
Si relacionamos el consumo de agua con la industria musical, es decir, con los festivales, conciertos y demás eventos en vivo, ¿cuál sería la cantidad de botellas de agua que consumirían los asistentes?.
Eso depende de muchos factores, desde el clima hasta el lugar, pero centrémonos en el principio de que cada persona bebe al menos 2 botellas de agua en un evento que dura de 4 a 6 horas.
Así las cosas, para un festival con capacidad de 10,000 personas se usan al menos 5,000 litros de agua.
En el Electric Daisy Carnaval, festival de música electrónica que se celebra en Las Vegas, al que asisten 145.000 personas, se consumen aproximadamente 1 millón de botellas, o 500.000 litros de agua durante los 3 días del evento.
Lo anterior según Patrick Atwater, director de desarrollo comercial de Event Water Solutions, una organización canadiense que busca reducir la necesidad de botellas de agua de plástico de un solo uso en festivales de música y eventos deportivos.
Pero nuestras acciones no solo deben ser individuales sino también colectivas, por eso mismo la industria del entretenimiento debe poner planes en marcha para tomar conciencia.
Aquí cinco festivales que ya están dando los primeros pasos para reducir el impacto medioambiental:
1. En el año 2019, el Festival Glastonbury prohibió la venta de botellas de agua de plástico fomentando el uso de botellas reutilizables y aumentando los puntos de hidratación en su perímetro.
2. En su última versión, el Sónar incentivó a la reutilización de recipientes mediante el préstamo de un vaso retornable con un depósito de 2 euros, los cuales se recuperaban al final del evento.
3. En su edición número 16 El Festival Altavoz, en Colombia, regaló a los asistentes un vaso reutilizable que se podía llenar en los distintos puntos de hidratación.
4. El Rototom Sunsplash es uno de los festivales más grandes de Europa y desde hace más de diez años viene trabajando en acciones que le permitan convertirse en un evento totalmente sostenible. En el 2019, El Rototom se declaró libre de plástico y también implementó la tecnología LED para la iluminación de las carpas y la instalación de paneles fotovoltaicos que redujeron en más de un 84% el consumo energético.
5.Shambala, un festival Northamptonshire, Reino Unido, ha sido condecorado por su trabajo con el medio ambiente. No venden carnes, los asistentes deben traer sus propias tazas y los residuos humanos de los baños se convierten en compost orgánico.