Židrūns: de Letonia para el Mundo
La agrupación proviene del circuito independiente de su país y nació en la ciudad de Riga, Letonia, en el año 2004. A la fecha han editado tres álbumes completos en estudio y un EP, consolidándose como una de las propuestas más sólidas de su escena local, al igual que en países como Estonia y Lituania.
El grupo está conformado por Ritvars Bīders (guitarra y vocales), Ulvis Urtāns (bajo), Anrijs Korps (batería y teclados), y Klāvs Kalnačs (vocales, guitarra y teclados), con quien hablamos sobre un concierto reciente y su nuevo álbum.
Židrūns es de las pocas agrupaciones que en la actualidad pudo presentarse en vivo y compartir con su audiencia el pasado 30 de Octubre. ¿Cómo fue esa experiencia?
Era nuestro primer concierto del año, por lo que fue un poco extraño encontrar a la audiencia con máscaras, así como sentir el miedo real del público por el hecho de estar reunidos y que potencialmente pudieran contagiarse por el virus; pero todo valió la pena alrededor de un sentimiento único para brindar alegría a la gente y eso lo veía en sus ojos.
Frente al reto de realizar un concierto en tiempos de restricciones tras la crisis generada por el COVID19 el cantante manifestó: “Teníamos la opción de realizar el concierto en un espacio cerrado con sillas a 2 metros de distancia, pero aún así el riesgo de infección era más alto. Las mismas autoridades nos recomendaron hacerlo al aire libre, aunque para esta época del año en nuestro país comienza el otoño, el promedio de temperatura es de 7 grados celsius y llueve mucho. Al final tomamos la decisión correcta y todos los tiquetes se vendieron rápidamente, para la época en que realizamos la presentación, el Gobierno autorizaba eventos con una capacidad de hasta 300 personas”.
“Todo el personal debía utilizar máscaras permanentemente y el perímetro debía estar totalmente enmallado e iluminado. Finalmente una semana después de realizar nuestro concierto, el Gobierno prohibió todo tipo de encuentros y actividades, tuvimos suerte de poder hacerlo”, agregó Klāvs Kalnačs.
¿Cuál es la diferencia entre este cuarto álbum en estudio y el material que habían editado antes?
Nuestro primer álbum “Židrūns un tas, ko nevar nest” (Židrūns, cargando lo inaguantable) creó una estructura sólida como base para el grupo, un sonido compacto con mucha química entre nosotros, algo que nos permitió seguir adelante componiendo mejor con el paso del tiempo. Tras la llegada de nuestro nuevo baterista, Anrijs Korps, entre el segundo y tercer álbum, sentimos una nueva dosis de energía con un toque especial para los nuevos temas. Luego el material se centró en la frase “Nuestro futuro no vendrá y los caminos no nos permitirán acercarnos", algo que nos acercó a un tono más experimental y arriesgado.
Para este álbum presentamos composiciones menos personales y planteamos el enfrentar las cosas que hemos provocado por andar retando al destino. La gran mayoría de canciones del material nuevo las compusimos tras concentrarnos en una casa de campo en las zonas rurales de Letonia.
Mientras desarrollamos la grabación nos enteramos del estado de emergencia declarado en nuestro país y en una gran cantidad de territorios en Europa debido al virus. De repente mucha gente en Europa comenzó a cambiar su comportamiento hacia un modo de supervivencia, como en una guerra silenciosa contra un enemigo invisible.
Así que ahora, el sentimiento que se percibe es que no hay presión o responsabilidad de hacer nada en especial, más que disfrutar el momento y capturar esa sensaciones creando y haciendo un buen trabajo, en nuestro caso con la música. De esa manera ni nuestros nietos, ni sus nietos se sentirán avergonzados de nosotros en caso de que partamos pronto.
¿Qué los inspiró a nivel musical y lírico para este nuevo disco? ¿Algunas influencias en particular?
Musicalmente hablando, para la época de grabación de este disco “XXX?”, muchos de la banda estaban sumergidos en el sonido de King Gizzard & the Lizard Wizard de Australia, Horse Lords de Estados Unidos y Oranssi Pazuzu de Finlandia.
Por mi lado, disfruto la música del mundo, cosas extrañas de folk, funk y en ethno rock, en general me gusta lo que suene exótico. Tal vez para este período he estado centrado en música de Medio Oriente y África, aunque también escucho mucho un proyecto de nuestro país que se llama Ligas PH3, es una muestra de folk oscuro con muchas emociones hermosas. Tenemos como consigna tratar de no copiar cosas de otros grupos pero es claro que estos sonidos que mencionaba han generado un impacto en nuestra música.
A nivel lírico manejamos en este disco tres ejes principales: el primero es una reflexión frente a lo que vivimos con el COVID-19 y su impacto en la sociedad con temas como “Rindās kails” (Sacando árboles como zanahorias), “Pirmais zīdītājs” (el primer mamífero que terminó en una sopa) y “Vai?” (¿No es este el tiempo que queríamos?). El segundo eje temático utiliza poemas arriesgados de escritores de nuestra generación y finalmente, el resto del álbum es más relajado; permite que nos divirtamos hablando de las cosas que observamos en la cotidianidad o durante épocas como la primavera.
Ustedes cantan en Letón, un idioma poco común en el mundo del rock, ¿han pensado en cantar algo en inglés para otras audiencias?
Realmente no lo creo, mi ocupación es ser traductor oficial de inglés y hablando musicalmente, las melodías en inglés me suenan a veces desgastadas. Escuchar mucho una canción en inglés a veces me hace querer escuchar otra cosa, salvo que sea algo que realmente sienta especial artísticamente hablando.
La radio en nuestro país programa mucha música también en inglés, pero siento que somos de Letonia y nuestra cultura se refleja de una mejor forma a nuevas generaciones cantando en el idioma que hablamos y en el que soñamos.
¿Qué expectativas tienen con el nuevo álbum?
Sentimos que hemos hecho lo mejor posible para tener un buen trabajo que sea de nivel para compartir. De esa manera comenzamos nuestra distribución global via I Love You Records esperando que haya público al que le guste y nos acompañe a un nivel personal en estos tiempos tan turbulentos. Definitivamente nos gustaría presentar este material en vivo a diferentes audiencias en Letonia y otros países. Sentimos que estas canciones tienen mucha energía para dar a la gente una experiencia en vivo.
¿Cómo fue el proceso de mezcla y producción en general?
La mezcla fue realizada por un reconocido ingeniero local llamado Lomiks y bajo la producción del mismo grupo. Al ser este nuestro cuarto disco, ya teníamos buenas ideas frente al sonido que queríamos. Al final realizamos dos mezclas master y en Septiembre tomamos la decisión final frente a cuál era la que nos gustaba más. Somos un ejercicio de total democracia, eso hace que a veces nos tomemos mucho tiempo en discutir de manera constructiva las cosas.
¿Qué han escuchado de Colombia y nuestra música? ¿Algún nombre en particular que cruce por sus mentes?.
Todos en la banda conocemos a Shakira y probablemente tratamos de copiar sus pasos frente al espejo durante la adolescencia (risas). Nos gustaría conocer mucho de artistas colombianos, sean de música rock, clásica, tradicional, electrónica o lo que sea que no conozcamos. También nos gustaría aprender sobre instrumentos tradicionales colombianos, son extraños y únicos. ¡Ya veremos!