Sobre la lírica de Cerati y de cómo escribió “Puente”
Una noche, el baterista y productor Martín Carrizo y el bajista Fernando Nalé volvieron al estudio en busca de un equipo. Estaban grabando “Bocanada” (1999), el segundo álbum como solista del argentino Gustavo Cerati; el ex líder de Soda Stereo les abrió la puerta y los acompañó, y en un momento, cuando estaban parados en el pasillo les dijo: “escuchen”. Carrizo y Nalé escucharon:
Hoy te busqué
En la rima que duerme
Con todas las palabras
Si algo callé
Es porque entendí todo
Menos la distancia
En aquel mini pasillo, recostados contra la pared, cuentan los músicos que el placer de lo que llegaba a sus oídos los derritió. Cerati armó “Puente” con base en la canción “4:35 In The Morning (Kid Loco Mix)” de Saint Etienne. Y en la letra conjugó esas frases que solía recoger de sus libretas y que reestructuraba para volverlas canción.
El argentino fue un artista que se adaptó ágilmente a los cambios del rock en los noventa, cuando muchos referentes latinos como Enanitos Verdes, Los Prisioneros, Upa! o GIT empezaron a desdibujarse. Pero además, su influencia lírica en el rock latinoamericano es incuestionable: esas formas de ensueño con relatos fragmentados, diálogos cotidianos, frases rasgadas con una gran fuerza poética por las imágenes que crea o por las interpretaciones que ofrece a quien las escucha.
Leía mucha literatura, especialmente a Jorge Luis Borges y a Julio Cortázar. Su lírica está cargada de reminiscencias, metáforas y alegorías a sus constantes lecturas de estos dos gigantes, como explica el escritor chileno Javier Alejandro Soto Cárdenas. Aunque claro que se trató de un proceso de transformación desde aquellas líneas del disco “Soda stereo” (1984), más ingenuas como las de “Te hacen falta vitaminas” o “Porqué no puedo ser del jet-set”, a las de “Bocanada”, el álbum al que pertenece “Puente”, donde Cerati utiliza el infinito y la eternidad no solamente como argumento temático sino como estructura. Algo muy borgiano.
“Bocanada” no es una producción más en la discografía de Cerati. Es el cierre de un empalme musical y la apertura de un nuevo panorama: el desarrollo de otra latencia que busca inspiración en el día a día, en la intimidad. Una pieza que, para el argentino, estaba hecha para andar, para ser banda sonora de nuevos destinos. Particularmente “Puente” fue ubicada en el puesto número 59 de las mejores canciones de la historia del rock argentino, tanto por la revista Rolling Stone (2000) como por MTV.
En el libro “Cerati en primera persona” (2014), la periodista e investigadora argentina Maitena Aboitiz explica que la letra de “Puente” tomó forma con una frase del director Eduardo Capilla, cineasta tras la cinta "+Bien" (2001), musicalizada y protagonizada por Cerati.
En el texto, Aboitiz cita al músico diciendo: “Son esos paladines que uno tiene. Cuando estás haciendo el disco están ahí apoyándote y vienen y te traen cosas escritas. Algo que tenía que ver con los átomos de alguien [...] Y otra cosa que me acuerdo es de Leo García: ‘causa y efecto’, un día vino y me dijo: ‘Estoy todo el tiempo pensando en causa y efecto’ y como estábamos cantando juntos y esa parte la tenía que cantar él conmigo, lo agregué”.
En este sentido son varios tipos de puente de los que habla la canción: “Por un lado uno podría hablar de una reacción romántica, de una esperanza de llegada, y el puente que se genera entre dos personas, y por otro lado es un puente con la gente también”, agregaba Cerati.
En estos tiempos difíciles, creemos un Puente de amor y protección cuidándonos entre todos.
— Gustavo Cerati (@cerati) August 11, 2020
Manuscrito de Gustavo de la letra del tema “Puente”, perteneciente al álbum “Bocanada” y realizado para el registro autoral de la obra. pic.twitter.com/cMfis2j65O
Frases nominales, oraciones cortas y unidades de sentido con omisiones intencionales. Un escenario donde se mantiene el vínculo entre la música y la poesía y se plantea una dicotomía entre una presencia deseada y una ausencia real y un locutor incapaz de entender “la distancia''. Luego el argentino habla del sol y del reflejo, de la claridad versus la apariencia. Y poco a poco estas divisiones se van esfumando ante el amor y la presencia con la repetición explícita de “Gracias por venir”.
Y aquí se tiende el otro puente, el del público: “Me acuerdo del juego de sintaxis. ‘Gracias por venir’, ‘por venir’ y el ‘porvenir'. Y ‘Puente’ es pura imaginación en realidad [...] Es la única canción en donde incorporo un poco la idea del público, o lo que puede llegar a pasar en esa canción cuando la estás haciendo con gente [...] También era una forma de neutralizar el ‘Gracias Totales', me había transformado en Míster Gracias totales”, explicaba el músico haciendo alusión a su resonada despedida en el Estadio de River Plate.
Por otro lado, el video sigue esa línea del viaje, aunque la idea del videoclip surgió de una mezcla de improvisación y casualidad. Originalmente la canción “Raíz” sería el corte promocional de “Bocanada”, por lo que la pieza audiovisual estaba siendo pensada para esta. Sin embargo, el sello les dijo que consideraban a “Puente” como el sencillo ideal, por lo que tuvieron que cambiar sus planes. Y así fue como nació esta obra que en Radiónica escogimos como la número uno en las Las 50 de Cerati.