El invaluable legado de Toots Hibbert para el reggae
Cuenta la historia que, en 1968, Frederick "Toots" Hibbert escribió una canción llamada “Do the reggay”, la lanzó con su agrupación The Maytals y desde ese momento la gente empezó a llamar así a un género nacido en Jamaica al que, hasta ese entonces, no identificaban con una palabra. “Reggae” se convirtió entonces en ese término capaz de englobar la esencia caribeña, electrizante y combativa de un sonido que se fue esparciendo por el mundo a un ritmo acelerado.
Esa historia es apenas una breve parte de la influencia de Toots en el reggae. En 1967 fue encarcelado por nueve meses por tenencia de drogas, cargo que nunca aceptó; sin embargo, ahí, tras las barras metálicas escribió una canción que no solo se convirtió en un éxito absoluto, sino en un bastión del género y un referente para las generaciones venideras: “54-46 Was My Number”.
Toots & The Maytals fue una agrupación que moldeó, a su antojo, sonidos que iban desde el soul, el gospel, hasta el rocksteady, el ska y el rock; sus canciones fueron el espejo de unas almas rebeldes y su relevancia fue tal que cruzaron fronteras para clavarse en los oídos de agrupaciones como The Clash, The specials o Madness, quienes influenciados por esos sonidos, le dieron vida al 2-tone o segunda oleada del ska.
Bien describían la voz de Toots en el Washington Post como “un hermoso gruñido que se origina en el corazón más que en la garganta” y ese gruñido nunca cesó: el mes pasado lanzó su disco “Got to Be Tough”, un álbum con la misma potencia y esencia, descrito por el portal especializado de música NME como “el primer álbum de la influyente banda en más de una década es sutil, pero Frederick 'Toots' Hibbert sigue siendo una fuerza inspiradora para el cambio”.
El pasado 11 de septiembre esa leyenda, sabia al escribir y delirante al interpretar en vivo, al que los medios no dudaron en llamar Dios del reggae, falleció, dejando un hondo hueco en la historia del género, en la música y un legado musical que perdurará y se anclará en la historia de Jamaica.
Recordémoslo con algunas de esas canciones que fueron cruciales:
"Do the reggay"
"54-46 Was My Number"
"Funky Kingston"
"Monkey man"
"Pressure Drop"