'Lumísphera' de Estados Alterados canción a canción
La lumísphera es una esfera que, en su emanación de luz, genera sonidos particulares que crean atmósferas algo psicodélicas. También es el nombre del sexto álbum de la banda paisa Estados Alterados, un disco que da cuenta de un avance en la ruta de exploración sonora del proyecto de Fernando Sierra (Elvis), Ricardo Restrepo (Ricky), Natalia Valencia y Felipe Carmona.
Entre luces, sonidos (llamados por ellos mismos) retro futuristas, y la búsqueda por querer hacer memoria de un territorio como lo es (o lo era) Medellín fueron la inspiración para que, entre 2017 y 2018 se gestara y finalmente presentara este disco. Siete canciones integran el álbum y, tras ellas, hay un trabajo de reinvención por parte de la banda, y de exploración sonora y conceptual, desarrollando un instrumento propio para brindarle un color particular (literal y metafóricamente) a su nueva producción.
Con Elvis logramos adentrarnos en el universo de Lumísphera para conocer con cierto detalle momentos de su creación, y la inspiración existente detrás de cada track que conforma una nueva placa de Estados Alterados.
¿De dónde sale la idea de crear un instrumento propio, la Lumísphera?
Los sintetizadores te permiten diseñar tu sonido, y los músicos electrónicos buscamos siempre un sonido propio. En esa búsqueda, uno termina construyendo su propia máquina para obtener un sonido único, que nadie más tiene. Yo no sé mucho de electrónica y el instrumento es algo básico en su construcción, pero sí genera una cualidad única en el sonido, algo muy personal, y esa es la búsqueda que está detrás de armar una máquina de sonidos o de ruidos.
La lumísphera suena retro futurista. Suena como a algo muy viejo, como a los primeros sintes realizados, y si bien el circuito del instrumento no es muy único, la forma de interpretarla sí es nueva y creada por nosotros. Es como ese balance entre lo clásico antiguo y algo que mira hacia adelante.
¿Por qué involucrar la memoria en el concepto del disco?
Es importante para nosotros la memoria. Yo siempre he creído en una frase que dice que la verdadera innovación está apoyada en las tradiciones, y es que cuando uno conoce su historia, de dónde viene, puede ver mejor para dónde va sin repetir lo que ya se ha hecho antes, y por ahí quisimos irnos en el camino de este disco.
Yo personalmente he sido siempre un entusiasta de la historia de Medellín y Antioquia, además Ricky y yo, que somos los veteranos de la banda, vivimos por fuera de la ciudad, y a veces en esa situación hala un poquito la nostalgia. Al encontrarnos con las imágenes del archivo fotográfico de Medellín, que se remiten a nuestros antepasados, nos sentimos tocados. La música basada en electrónica a veces suele ser muy fría, y pues este elemento le da algo de calidez, le da un toque muy personal.
¿Cuál fue el papel de Amir Derak en la creación del disco?
De alguna manera fue iniciativa de él, aunque nosotros lo hayamos buscado para hacer parte del disco. Él y Ricky se conocieron hace un tiempo y, a raíz de un intercambio musical entre las bandas de Amir (Julian K y Orgy) y y Estados Alterados, él quiso trabajar con nosotros, ya que encontró muchos rasgos comunes entre los proyectos sonoros. Viajamos a Los Angeles para trabajar con Amir en su ambiente, advirtiéndonos que nos iba a incomodar para sacarnos de nuestra zona de confort, a exigirnos, y esas cosas se convirtieron en retos que dieron muy buenos frutos.
¿Cuál es el paso que da más allá Estados Alterados con Lumísphera?
Yo diría que en Lumísphera podemos hablar de un nuevo Estados Alterados. Veníamos hacía rato Ricky y yo trabajando con personas que iban y venían por temas logísticos, de tiempo y de compromiso con el proyecto. Hace un tiempo para acá comenzamos a trabajar con Natalia y Felipe como músicos en concierto, cada uno con fortalezas tremendas, y para este disco ya comienzan a hacer parte de la banda, con aportes creativos de ellos en las canciones nuevas y hasta su aparición en la carátula del álbum (risas). Hay una sinergia particular, algo diferente al Estados Alterados que habíamos escuchado en anteriores discos.
Después de casi 30 años, ¿cuáles son las preocupaciones de Estados Alterados como banda?
La principal, tener algo qué decir. A muchas bandas les pasa que inician sin mucho para contar en sus canciones. Yo siento que desde el principio hemos tenido una preocupación de hablar sobre lo que nos toca como personas, más allá de proponer fiesta con el ritmo. Hay cosas de las que uno quiere hablar, que hacen falta ventilar porque se te salen si no lo haces, y es importante para nosotros tener esa oportunidad de ventilar esas cosas con la música.
Otra preocupación es la constante búsqueda de un sonido propio, la experimentación sonora que nos permita ser únicos. Desde el estudio de los pioneros de la música electrónica que hicieron cosas increíbles que a veces quedan en el olvido y que hoy deberíamos rescatar, hasta las últimas músicas y sonidos que se están generando ahora por medio de la inteligencia artificial, por ejemplo. Todo eso nos apasiona, nos interesa, y queremos abordarlo en nuestra música.
Esta es la historia detrás de cada canción de Lumísphera, en las palabras de Elvis:
Bendiciones: fue hecha en conjunto con Julian K, la banda de Amir Derak, productor del disco, con colaboraciones vocales e instrumentales de la banda de Amir. Habla de la falsa espiritualidad, un tema recurrente en Estados Alterados, donde la espiritualidad es más pose que verdadero sentimiento.
Consideramos que 'Bendiciones' es una palabra de la que se ha abusado últimamente, porque quien te la dice luego querrá pedirte algo. Se refiere a tanto grupo que busca con la espiritualidad sacarle dinero a la gente y buscar poder.
Pueblo: es una canción directamente influenciada por las visitas al Archivo histórico de Medellín. Fue muy impactante ver una calle principal donde no reconoces ningún edificio y si no fuera por las montañas o las iglesias al fondo no te ubicarías. Ese paso de pueblo a ciudad, ese crecer tan desbordado que no nos dio tiempo de adaptarnos y de madurar como ciudadanos nos deja con mentalidad de pueblo viviendo en ciudades es algo que no solo se da en Medellín sino en muchas ciudades. La canción habla de la mentalidad cerrada que seguimos teniendo, haciendo referencia en una estrofa a un pasaje del himno antioqueño diciendo “es hora ya de dejar, es tiempo ya de soltar el hacha que tus mayores te dejaron” quiere ser un llamado para cambiar de mentalidad.
Miedo: una frase del coro, “el miedo es el mensaje” parafrasea una frase muy célebre de Marshall McLuhan que dice “el medio es el mensaje”, refiriéndose a los medios masivos, y lo cambiamos por miedo porque es una sensación más vívida, te quieren manipular todo el tiempo con el miedo, y no solo hablo de política, sino que también funciona en cualquier esfera. A través de los alimentos que puedes comer o los lugares donde puedes ir, te quieren hacer creer que cualquier cosa te puede matar o dañar.
Caín: Caín es una canción que canta Ricky, que no cantaba en una canción desde hace casi 30 años (en 'Opulencia' de su primer disco). La letra habla del mal entendido poder, de lo que creemos que es ser exitoso en la vida, lograr escalar a cualquier costo, haciendo cosas de las que no se suele hablar pero que están presentes en los entornos empresariales en algunos casos. Habla de la traición, como Caín que mató a su hermano.
Animal: también tiene influencia del archivo histórico fotográfico de Medellín, sale del contraste de lo que vimos en esas imágenes, de caminos, árboles y pocas personas pasando, y lo comparas con el hoy en esas calles, un hervidero de gente, micro tráfico de drogas y atracos. Sientes que estas ciudades son como un animal, con edificios que parecen espinas de puercoespín, una ciudad tensa que te persigue, que es un ente vivo que te puede tragar si te descuidas.
Mantra: es literalmente un mantra. Deliberadamente monótona, con una retahíla de palabras interrogando a una persona que escucha la canción, preguntándole por sus deseos, sus anhelos, que busca llevarte lejos, induciéndote a una meditación. Habla al interior.
Like: "Como me veo, quién me sigue, si me quieres regálame otro like". La letra comienza como un juego sado masoquista, pero finalmente es un tira y afloja del contacto virtual entre personas, que se presta para que en lo digital puedas ser más atrevido ya que no hay contacto físico con la otra persona.