La euforia del ska a manos de Asustos Pendientes
Existen dos tipos de bandas. Las que se juntan para tocar siguiendo un contrato y hasta allí llega el impulso, y las que son la extensión de una amistad. Para nuestra alegría, Asustos Pendientes pertenece al segundo grupo.
Esta banda formada en 2007 es una explosión musical creada desde un lugar de camaradería y honestidad que ha crecido poco a poco hasta convertirse en un referente contemporáneo del ska de Medellín.
Para Asuntos Pendientes todo comenzó en la Escuela de Artes Débora Arango de Envigado y desde allí hemos podido ver cómo su carrera no para de crecer. Con tres álbumes de estudio y mucha actitud, el grupo llegó por segundo vez al Concierto Radiónica, esta vez para celebrar que estamos vivos en medio de este caos y que la música y el baile son la mejor forma de resistencia que existe.
Sobre el escenario, Asuntos Pendientes es una banda que fluye como el viento. Este es un grupo que se siente cómodo experimentando y mezclando géneros como el reggae, el pop, el rock y hasta el hardcore. Cada canción es una sorpresa porque en un instante puedes estar cantando con los ojos cerrados y las manos hacia arriba y al otro puedes estar lanzando patadas en un pogo.
Uno de los momentos más emocionantes de esta presentación fue cuando tocaron su más reciente sencillo, “La Playa”, el cual fue dedicado a los 15 años de Radiónica; una canción romántica y muy tranquila. Luego pasaron a “Punto de Inflección” que, en cambio es puro grito y euforia.
A parte de su mutagénica apuesta sonora, la química que tienen los miembros de Asuntos Pendientes es muy honesta. Se nota que están dándolo todo, que disfrutan cada acorde y cada golpe de percusión y que no se guardan nada porque este es un grupo que comparte toda su euforia y pasión con la música.