Isla de Perros: rebeldes, punketos y anti-tradicionalistas
“¡Van a terminar en la cárcel!”, exclamó la dulce maestra cuando vio a tres de sus estudiantes de bachillerato escuchando punk, montando en patineta y cuestionándolo todo, algo poco habitual en un colegio de Ipiales, Nariño, donde comienza esta historia.
Cegada por los prejuicios, la misma maestra les auguraba a los jóvenes un futuro vandálico y dedicado a la vagancia; de ahí que durante su adolescencia, Cristian, Esteban y Daniel entrarían a conformar las filas de los “marginados”, una etiqueta social que posibilitaría el inicio de un nuevo destino.
Este recuerdo lo trae a su memoria Esteban, miembro de la banda 'Isla de Perros', un proyecto que suena a punk, ska y rock hecho a pulso, creado con la convicción de ser contracultural y anti-tradicionalista, quienes pasaron por los micrófonos de Radiónica:
Entre los comentarios que escuchaban y la agitada vida de un adolescente, había un lugar que servía de asilo: la casa de Esteban era un refugio para reunirse a escuchar música y a jugar videojuegos. Hoy, ese refugio es un estudio de grabación que fortalece la escena local al ofrecer sesiones en vivo gratuitas para otras bandas.
La formación actual del grupo incluye a Daniel en el bajo, Esteban en la batería, Marco y Cristian en guitarras y voces principales. Si se preguntan el porqué del nombre, es una clara referencia a la película de Wes Anderson, pero también, es un guiño a la amistad que han construido y al amor que profesan por sus mascotas.
Isla de Perros - Ilustración de Daniel Cabezas
Así fue cómo en 2012 iniciaron como banda, en medio de las clases y los uniformes escolares. “Las primeras reuniones eran en la casa de Cristian o en mi casa y cuando apenas nos compraron las primeras guitarras y los primeros amplificadores que a veces ni funcionaban”, cuenta Esteban entre risas.
Pero la vida adulta los tomó por sorpresa: Cristian se fue a prestar servicio militar, Daniel y Esteban viajaron a Pasto para estudiar en la universidad. En este punto, la banda hizo una pausa de 10 años.
Un día de 2023 se decidieron a regresar. Cristian llamó a su primo: “me dijo ¿quieres ir a tocar el bajo?” recuerda Marco a propósito de cómo se unió al grupo y comenzaron de nuevo.
Después de grabar algunas sesiones en vivo en el estudio, no pasó mucho tiempo para que se aventuraran a crear un álbum en el que se recogiera la crítica social, las emociones de rabia, inconformidad, rechazo, desilusión y desmotivación que surgen al vivir en una sociedad contemporánea, donde el capital económico vale más que el cultural.
A través de 'Isla de Perros' y 'Los Perros No Van al Cielo', dos EPs independientes compuestos por un total de 8 canciones lanzadas en dos bloques, se presentaron ante el mundo como un nuevo proyecto que irrumpe en la escena musical de Nariño.
Grabado en el estudio Isla de Perros, con la producción de Felipe Rosas, el apoyo gráfico de Daniel Cabezas y el arte de Vivian Pantoja, este trabajo musical es la promesa de un experiencia sonoro introspectiva, de confrontación con el mundo externo e interno, en el que el punk musicaliza las angustias, las desdichas y el desasosiego, siendo el arte un vehículo para de expresar los sentires a través de los acordes, las baterías estridentes y las letras contestatarias.
El álbum abrió un nuevo camino para la banda, durante el 2023 lograron ser reseñados por diferentes medios nacionales internacionales, además, conquistaron el escenario del Festival Galeras Rock en su edición número 15 y participaron en el Festival de Nuevas Bandas como invitados.
La historia de la banda continúa escribiéndose. Así que, maestra, ni en la cárcel, ni vándalos, ni vagos. Ellos son Isla de Perros un proyecto musical que despierta el espíritu arrasador que condena lo impuesto, lo tradicionalista y lo políticamente correcto.