12 canciones en 18 minutos: así es el debut de Kenobi, desde Cali
Los caleños Kenobi, una banda de punk hardcore, o punkcore -como lo denominan ellos-, están estrenando su primera producción discográfica, Nosotros (2019): “Es el producto de más de un año de grabaciones que iniciaron en junio de 2017, en la casa de Carlos Bonilla, guitarrista de la seminal banda de punk caleña Resistencia” explicó Charlie Kenobi.
El disco contiene 12 canciones, 10 propias de la banda, un cover de la ya extinta banda caleña 752-B y finalmente, una interpretación en español de “I dont wanna hear it”, clásico del hardcore punk de Minor Threat.
Según cuenta Kenobi, el disco, está altamente influenciado por bandas como 7 Seconds, Pennywise y Kid Dynamite, con guitarras y baterías rápidas, un bajo que pelea por destacarse, y la voz rasgada de Danny Kenobi que por momentos se torna melódica para dar un respiro a los temas en los que predominan estilos vocales influenciados por el hardcore punk.
“La intención con la que se diga una línea en una canción depende del tono en que la cantamos, de ahí el que hayan partes con voces más rasgadas o pesadas y otras con voces más melódicas; siento que es una forma de canalizar todo lo que se siente al decir lo que está escrito en la letra de cada canción” agregó el vocalista Danny Kenobi.
Dentro de este debut se abordan diverso temas, algunos cortes son llamados a la unión entre los seguidores de los diferentes géneros musicales, tal es el caso de la canción PunkCore. Las letras introspectivas que abordan asuntos como la resiliencia sin importar las adversidades (Firme), las convicciones que guían a las personas todos los días como dice el tema Convicciones o la añoranza y los recuerdos que dejan los que han partido del mundo terrenal como dice In Memoriam:
“Las letras son directas y literales, la idea siempre ha sido que las experiencias (buenas o malas) sirvan para aprender a crecer como seres, de ahí que trate de compartir un mensaje positivo, de fuerza, de una actitud más proactiva hacia lo que uno se enfrenta a diario, a la vida misma”.
La ilustración de portada fue elaborada por una ilustradora caleña llamada Ana María Sanclemente, quien ilustró a los integrantes de la banda. El diseño interior corrió a cargo del diseñador Jacobo Pérez, quien plasmó un estilo caótico y saturado con influencia grunge en el interior del disco.