El rap en el cerebro
Imagínense saber qué pasaba en la cabeza de Eminem durante su legendaria batalla de freestyle, representada en la película 8 Mile. Esta técnica de improvisación requiere tal habilidad, más allá de la musical, que unos científicos se dieron a la tarea de estudiarla en laboratorio. Conector Radiónica.
Fascinados por los resultados del estudio 'este es tu cerebro en jazz', realizado en 2008 por neurocientíficos de la univiersidad Johns Hopkins en Estados Unidos, los raperos de Los Ángeles, California, Michael Eagle y Daniel Rizik-Baer decidieron ofrecerse como "conejillos de indias" para un estudio similar publicado a la fecha de este artículo.
Las resonancias magnéticas hechas a los jazzeros mientras ejecutaban diferentes técnicas, sobretodo la improvisación, mostraron que su cerebro bloqueaba las áreas relacionadas con la inhibición y la autocensura, estimulando la liberación y creatividad artística, dando paso a una especie de trance de sonidos y combinaciones jamás tocados antes.
Así también, el estudio de los raperos improvisando sobre un beat, creando nuevas e intrincadas rimas, dio mucho más que mujeres y bling bling -para hacer una referencia a un estereotipo pasado de moda-.
"Las correlaciones neuronales de creatividad son poco entendidas. El rap da una oportunidad única para estudiar la improvisación lírica espontánea, una forma creativa multidimensional en la interfaz de la música y el lenguaje". Nature.com
Los investigadores del Instituto Nacional de Sordera y Otros Desórdenes de Comunicación en Estados Unidos, encontraron que tal como los jazzeros -al comparar sesiones de improvisación con sesiones ensayadas-, los raperos bloquean su atención a lo que pasa alrededor -logrando ignorar, por jemplo, a un público agresivo-, pero a la vez su concentración tampoco está en buscar las palabras para luego combinarlas en complicadas y trabajadas estrofas. Lo increíble entonces es que el lenguaje les fluye rápida y libremente a través de conexiones particulares y ahí está su creatividad.
El laboratorio también reportó una fuerte actividad en las áreas que motivan la acción y el pensamiento, suprimiendo las de tareas que requieren atención y control determinado. Mejor dicho, mientras improvisan, piensan muy rápido y sin parar, enfocándose en varias cosas al tiempo, aparentemente sin relación.
"Pero al contrario del estudio de jazz, estos cambios son motivados en los raperos por el hemisferio izquierdo del cerebro, el área donde se procesa el lenguaje", dijo Allen Braun, jefe de la investigación.
El equipo también encontró una red de conexiones en los cerebros de los raperos durante las batallas de improvisación en el que se vinculan, en el lóbulo frontal, algunas partes del cerebro responsables de la motivación, el lenguaje -claro-, la acción y la emoción.
La improvisación es entonces un proceso complejo de conexiones y estímulos focalizados y especializados, y un espectáculo digno de ver.
El estudio luego buscará saber qué pasa después del proceso de creación: la revisión del mismo. Para esto, van ahora a reclutar un par de poetas y escritores con mucho tiempo libre.