Aerophon
“Desde Bogotá, Ruzto, Takuma y Saks, brindan una poderosa pista que representa a los escritores suramericanos de Grafiti y permiten que el mundo sepa cómo se está desarrollando en Colombia”, así escribía en el 2012 Complex Magazine, una de las plataformas más respetadas de hip hop, sobre Graffiti, una canción de Aerophon lanzada en el 2010. La corta pero significante reseña aparecía en el marco de un listado llamado las 25 mejores canciones de grafiti.
La relevancia no iba atada al hecho de que Aerophon era la única agrupación latinoamericana que aparecía en el artículo, ni que en esos tiempos la mención de agrupaciones colombianas e independientes era bien limitada, sino que era casi una premonición de la importancia que a futuro tendría este proyecto.
Hay quienes piensan que es inverosímil contar la historial del rap capitalino sin nombrar a Ruzto y a Frank Takuma, y no se equivocan. En un momento donde el hip hop nacional era uniforme, tanto en sus sonido como en sus líricas, Aerophon se propuso a darle una vuelta a las temáticas, a perfeccionar los beats, a usar el canto y la melodía como una nueva herramienta y a experimentar con samples de bolero, salsa y tango.
En medio de las canciones sonaban las boquillas de los aerosoles, hablaban de la agitación del grafitero y hacían alusión a un estilo de vida; no por nada, grafiteros y skaters escogieron discos como ‘Al amanecer’ (2010), ‘Expreso Aerophon’ (2012), ‘Reloj de fe’ (2013) como la banda sonora de sus noches de asfalto.
‘Pulsaciones’ (2015) y ‘Horizonte’ (2018) marcan el curso normal de la evolución de una banda que no solo alumbró el camino para las generaciones venideras, sino que siguen siendo vigentes. Razones de sobra para darles la bienvenida a esta nueva edición del Concierto Radiónica.