Patricia Prado, La guardiana de la Linterna
San Antonio es un barrio icónico de la ciudad de Santiago de Cali. En sus calles se respira arte y cada fachada es un lienzo para los artistas itinerantes que visitan la ciudad y plasman su sentir. En este icónico barrio de calles pintorescas, se encuentra, La Linterna, la imprenta tipográfica más antigua de la ciudad que en pleno siglo XXI trabaja con máquinas que datan de 1870 y 1890.
Conciertos, información sindical, eventos teatrales, recitales poéticos y hasta propaganda política hacen parte de los carteles publicitarios que se producen en el taller tipográfico ubicado en la carrera 5ta con 2da en San Antonio, en una bodega de puertas amplias, cuya fachada ha sido tapizada con carteles de todos los tiempos.
Patricia Prado Pabón es caleña cien por ciento. Nació en el barrio Ciudad Córdoba, creció en la casa de su abuela junto a toda su familia, en el barrio Las Acacias y actualmente vive en las empinadas y pintorescas calles de San Antonio. A sus 32 años, esta diseñadora gráfica de profesión, enfoca su trabajo en la creación de estrategias de comunicación para la salvaguardia, el fortalecimiento y la circulación de las artes gráficas en nuestro país.
En el año 2017 Patricia estaba planeando una exposición itinerante para los artistas de la ciudad y llegó a La Linterna para imprimir el póster publicitario, sin imaginarse que esta visita al taller tipográfico “accidentalmente” uniría sus dos pasiones: el diseño gráfico y la gestión cultural.
Eran tiempos difíciles para La Linterna, pues con la prohibición de los carteles en el espacio público emitida en la capital del país, sus finanzas se vieron muy golpeadas. Para el taller cada evento en Bogotá representaba por lo menos la impresión de 10.000 carteles, para Cali en un evento grande se imprimían por lo menos 5.000. La drástica disminución de trabajo sumada a la competencia contra máquinas que imprimen miles de carteles por hora, tenían a La Linterna en jaque.
Eslabón perdido, era el título del afiche que Patricia iba a imprimir la tarde en la que se enteró que la imprenta tipográfica más antigua de Cali, estaba a punto de desaparecer. Curiosamente ella y su estudio de diseño Ternario, resultaron ser el eslabón que la linterna necesitaba para seguir luchando por sobrevivir.
“Justo cuando me encuentro en mi vida con La Linterna se empiezan a unir esos cabos. La Linterna tiene un potencial gigante para que los diseñadores podamos empezar a hablar de identidad y para mí es la puerta de entrada a la gestión cultural enfocada en el arte gráfico”, cuenta Patricia.
Echando mano del disfrute caleño por la salsa y evocando a las luminarias que han enriquecido la cultura salsera en el mundo, Patricia les propuso a los maestros de La Linterna, Olmedo Franco, Héctor Otálvaro y Jaime García, invitar a diferentes artistas gráficos para hacer una colección de afiches en homenaje a salseros como: Celia Cruz, Tito Puente, Cano Estremera, Roberto Roena, entre otros. La colección lanzada en el año 2018, se llamó: “Váyalo”, y contó con la participación de artistas como: OtraLopezMás, Plata, Violenta, Mesek y Don fingo.
Patricia es una rockera innata que siempre se inclinó por los sonidos estridentes del metal y que gracias a la gestión cultural se ha ido enamorando de la salsa, las músicas alternativas y las diferentes sonoridades que han llegado a su vida.
Esta soñadora que busca brindarle a Cali un espacio en el cual los artistas gráficos de la ciudad puedan dialogar, encontrarse con otros artistas del mundo, exponer sus obras y por supuesto ser reconocidos por su talento; ha ido materializando sus anhelos al lograr que La Linterna, sea una de las diez Escuelas Taller que hay en el país. Contribuyendo con ello al fortalecimiento de estos programas de formación para el trabajo y el desarrollo humano, que benefician principalmente a jóvenes en situación de vulnerabilidad.
El taller tipográfico además se ha convertido en un aliado para las universidades de la ciudad pues sus estudiantes tienen la posibilidad de aplicar sus conocimientos, crear, proponer, y por supuesto, compartir con los diferentes artistas del mundo que hacen residencias creativas, conversatorios, pasantías, proyectos colaborativos de impresión, entre otras actividades que visibilizan el valor del arte gráfico urbano en todas las latitudes.
Parte de los logros de este proceso de gestión se han dado gracias al apoyo y la juntanza con diferentes colectivos gráficos de la ciudad, dando paso a procesos como el Festival de Diseño del Pacifico y el Circuito Gráfico de Cali, movidas que promueven el turismo cultural y creativo a través de la Cali gráfica.
Patricia opina que: “Cali es una ciudad diversa a nivel cultural y por eso está en el aire la posibilidad de crear, de imaginar, de poder decir, se me ocurrió algo aquí, o mira qué podemos hacer acá, uy qué bacano poder rescatar esto, que bacano poder hacer aquí una exposición en la calle, Cali es una ciudad que permite eso y que permite imaginar”.
La Linterna se niega a dejar extinguir la luz de las artes gráficas en Cali y poco a poco, de la mano de Patricia y otros artistas, ha ido consolidando su papel como escenario de aprendizaje y exploración para la nueva generación de diseñadores gráficos de la ciudad de Cali.
“Se vale soñar y también se vale hacer cosas para cumplir los sueños, porque no es solo imaginar y quedarse allí, sino también tomar la batuta y decir ¡Vamos a hacerlo real, vamos a hacer que suceda! Entonces yo creo que Cali, en mi perspectiva de ciudad como escenario cultural, en definitiva, debería apreciar un poco más y valorar el trabajo del arte gráfico de la ciudad”, concluye Patricia.
Para conocer más acerca del trabajo de Patricia y La Linterna entren a: @PatPradoP