El BIFF, un festival para público insumiso
Según cuenta Andrés Bayona, el BIFF nació como una iniciativa de los diferentes agentes de la industria audiovisual colombiana motivados por el deseo de tener un "verdadero festival de cine" para la ciudad de Bogotá. Hace cinco años se reunieron los representantes de los exhibidores, distribuidores, directores y productores audiovisuales a pensar en un festival de cine para la capital, que si bien tiene numerosas muestras y las carteleras independientes se han arriesgado por traer cine de vanguardia, propóstivo y renovador de lenguajes y estéteticas, no tenía para ese entonces un festival que ofreciera al público capitalino eso que rueda por las pantallas de los grandes y renombrados festivales de cine del mundo.
El BIFF, "bajo el concepto de una programación arriesgada, diferente, y pensando sobre todo en atender sus audiencias locales, hoy en día presenta con orgullo una programación que ubica a Bogotá dentro de los grandes eventos del circuito fílmico internacional".
Efectivamente el BIFF le ha apostado en sus cinco años a consolidarse como el festival de Bogotá y lo ha hecho con la selección de títulos que han sido premiados en los mejores festivales del circuito internacional. Para la dirección del festival la importancia de los eventos culturales se basa en el criterio de los programadores o curadores, y en ello el BIFF se la ha jugado por programadores jóvenes, con miradas frescas que se han visto de una u otra manera reflejadas en la misma estructura del festival, con categorías y secciones fuera de lo común, que no responden a categorías tradicionales (procedencia, formato, duración) para agrupar las películas.
"El BIFF es un laboratorio y parte del reto es el estar reinventándose todo el tiempo. Nuestro público objetivo son los jóvenes y la estrategia es hablar su mismo lenguaje. Es por eso que no nos obligamos a mantener las secciones fijas durante el tiempo, porque de acuerdo a los títulos seleccionados para cada edición, podremos encontrar nombres y secciones diferentes pero que mantienen inmodificable el espíritu del festival."
Colombia viva, Espíritu joven, Masters, Fantasmas del pasado, Insumis@s, Retrospectiva de Autentika Films, Cine conciertos y Biff kids fueron las secciones del BIFF para su quinta edición, y con ellas el festival sigue apóstandole a los intereses que lo vieron nacer: presentar lo mejor del cine colombiano (aunque este año solo incluyeron 3 títulos nacionales en su programación); títulos arriesgados y desafiantes; obras de icónicos directores; clásicos; y formatos híbridos con personajes desobedientes y atípicos. También se han ido ampliando los espacios y los públicos del festival con proyecciones para niños, y exhibiciones musicalizadas en vivo, además de una agenda académica que ha involucrado a jóvenes e industria.
Sobre la producción y realización de eventos culturales, sobre el público del BIFF y la curaduría y los festivales. Hablamos con Andrés Bayona.